Ciudad del Vaticano.- ¿Qué pasaría de caer en un agujero negro?, ¿cuál es el destino del cosmos?, o ¿qué pasó en los primeros instantes del Big Bang?, son algunas de las preguntas que intentará responder una conferencia científica convocada por el Vaticano
esta semana.
“Agujeros negros, ondas gravitacionales y singularidad del espacio-tiempo” es el título del congreso organizado por el observatorio astronómico de la Santa Sede, que iniciará en Roma mañana martes 9 de mayo y se extenderá hasta el viernes 12.
El encuentro convocará a algunos de los cosmólogos más importantes del mundo, entre ellos George Ellis, Andrei Linde y Joe Silk, además del premio Nobel de física en 1999, Gerald ’t Hooft.
“Uno de los objetivos de la conferencia es animar a una fructífera interacción entre los participantes, provenientes de la cosmología teórica y de la cosmología de observación, y crear un ambiente propicio para el nacimiento de ideas nuevas”, indicaron los organizadores.
Además, la reunión planteará otras interrogantes como cuáles son los límites de la cosmología moderna y cuáles son los desafíos científicos que podrán ser explotados en el futuro próximo.
Las sesiones tendrán lugar en la sede central de la Specola Vaticana, uno de los observatorios astronómicos más antiguos del mundo, y que se encuentra en la residencia de verano de los Papas, ubicada en Castel Gandolfo, unos 25 kilómetros al sur de Roma.
Organizada con el apoyo del Instituto Nacional de Astrofísica y del Instituto Nacional de Física Nuclear, ambos de Italia, la conferencia tocará las más importantes cuestiones abiertas de la cosmología y de la astrofísica moderna.
“Acabemos con un mito, lo que se hace en el observatorio astronómico de la Santa Sede no es teología o filosofía sino ciencia, principalmente astronomía o cosmología", explicó el sacerdote jesuita Gabriele Gionti, cosmólogo de la Specola Vaticana, durante la conferencia de presentación del congreso.
"Ahora organizamos un congreso científico y sólo científico”, agregó. El mismo busca celebrar la figura de George Lemaitre y su herencia científica, a 50 años de su muerte. Miembro de la Fraternidad Sacerdotal de los Amigos de Jesús, es considerado uno de los “padres” de la teoría del Big-Bang.
Lemaitre fue el primero en explicar, en 1927, que el movimiento de las galaxias se debe a una expansión del universo y no producto de un desplazamiento independiente de los objetos observados. Luego desarrolló la teoría del átomo originario, que pasó a la historia como el “Big-Bang”.
Él comprendió que, yendo hacia atrás en el tiempo, se podría llegar a un momento en que el universo se encontraba en un estado de densidad elevada, que él comparó con un “átomo original” que habría dado inicio a todo.
Fundada en 1891 por el Papa León XIII para combatir las persistentes acusaciones lanzadas contra la Iglesia de ser contraria al progreso científico, la Specola estaba ubicada inicialmente sobre la colina del Vaticano, detrás de la Basílica de San Pedro.
Con el aumento de la luminosidad de Roma, Pío XI autorizó su mudanza a la residencia de Castel Gandolfo, y ya desde hace unos años esa institución realiza su actividad de observación en el Vatican Observatory Research Group (Vorg) de Tucson en Arizona, Estados Unidos.