Dentro de una acción global respaldada por ambientalistas de todo el mundo, para evitar la extinción de la vaquita marina, se urge la prohibición "permanente" de todas las redes de enmalle y al retiro inminente de las redes fantasma en el Alto Golfo de California para
erradicar la pesca incidental que solo ha dejado a menos de 30 ejemplares probados según registros sonoros marítimos.
"Solicitamos al gobierno que no permita que perdamos a esta especie, única en todo el mundo", llamó desde México el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).
Desde el Museo Franz Mayer, Los ambientalistas subrayaron que salvar al mamífero marino más amenazado del mundo requiere de "un esfuerzo global urgente y coordinado que también prevenga daños irreversibles al patrimonio mundial del Golfo de California, de manera que la vaquita y otras especies puedan preservarse con las comunidades locales".
En el análisis de la WWF, "Se esfuma la Vaquita: Salvando a mamífero marino en mayor peligro de extinción se presenta una ruta crítica para proteger a la especie ante el fin del ciclo de la prohibición por dos años para usar redes de enmalle a los pescadores de la zona.
A pesar de los esfuerzos del gobierno mexicano, las autoridades no han demostrado que la prohibición temporal se haya aplicado con efectividad. Prevalece la pesca ilegal con redes de enmalle lo que ha provocado la disminución del 90% de la población de vaquita marinas entre 2011 y 2016.
Descubierta apenas hace 60 años, hoy la vaquita está al borde de la extinción; "a menos de que actuemos decisivamente hoy, podríamos perder a la vaquita para siempre", insistió Jorge Rickards, director interino de WWF en México.
Conocida también como "panda de mar" por las manchas oscuras alrededor de los ojos, la vaquita marina es endémica del Alto Golfo de California. La pesca no sustentable y el tráfico ilegal de especies (impulsado por la demanda de la vejiga nanatoria o "buche" de la totoaba, otra especie en riesgo de extinción) obliga al compromiso no solo de México, sino también de Estados Unidos y China para que "intercepten" y "detengan" la venta de productos de totoaba.
Este año se han retirado 374 redes de enmalle que fueron abandonadas por pescadores ilegales al ser sorprendidos por autoridades, pero hay un gran número de redes "fantasma" que aún siguen atrapando especies (9 halladas muertas enredadas en los dos últimos años), alertaron.
Si las comunidades pesqueras no se apropian de los recursos marinos no habrá posibilidad de salvarlas, ahí es donde ha fallado la estrategia para salvar a la vaquita, opinaron.
Como se recordará, México está impulsando "santuarios" marítimos para contar con resguardos que permitan la preservación de la vaquita.
"Estamos trabajando junto con los más destacados expertos en temas de cautiverio"; sin embargo, los ambientalistas de la WWF alertan que la decisión conlleva "un alto riesgo pero dado el bajo número de especies y la fuerte ilegalidad que sigue ocurriendo en la zona, es la salida más viable para evitar la extinción de la vaquita".