El investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), Javier Castro Rosas, desarrolla desde el año pasado un proyecto para patentar un proceso del aguamiel que permitirá funcionar como un elemento
edulcorante para las personas que padecen algún tipo de diabetes.
En entrevista para la Agencia Informativa Conacyt, el integrante del área académica de Química en Alimentos explicó que este producto surgió debido a las versiones de personas diabéticas que aseguraban haber mejorado en su salud tras consumir aguamiel fresca, por lo que comenzaron con la experimentación previa en ratas.
El académico refirió que iniciaron con un proceso de inducción de diabetes en ratas. A un lote de ratas se les suministró aguamiel sin y con el proceso de pasteurización, mientras que a otro grupo se le aplicó tratamiento médico que reciben personas diabéticas, a otro segmento no se les destinó algún tipo de sustancia, y uno más de ratas sanas, para comparar los resultados.
Durante seis semanas el investigador, auxiliado de estudiantes de posgrado y licenciatura en química en alimentos, realizó dichos experimentos en los cuales se monitoreó la evolución de las ratas y al final del mismo se sacrificó a los roedores para medir si hubo algún tipo de daño a los mamíferos en los órganos, e identificaron que en las ratas normales su crecimiento fue sin ninguna alteración, mientras que las diabéticas sin tratamiento subieron de peso y después lo perdieron, además de que presentaron alopecia y fueron más agresivas.
En las ratas que habían recibido fármacos regulares, mantuvieron el peso esperado, en tanto que las que consumieron aguamiel pasteurizado continuaron con la misma talla, mientras que las que lo tomaron sin modificaciones bajaron de peso y los niveles de glucosa se redujeron, ya que las que no fueron atendidas llegaron a registrar hasta 300 mg/dl de azúcar, en tanto que las que se medicaron con químicos fue de 180 y las de aguamiel fue de 120.
Para el investigador, estos resultados sugieren que el aguamiel también sirve para la regeneración del páncreas como lo registraron las ratas que recibieron dicho tratamiento, por lo que contemplan que ayuda a controlar los niveles de glucosa de manera más eficaz.
Agencia Informativa Conacyt (AIC): ¿A cuántas ratas se aplicó el estudio?
Javier Castro Rosas (JCR): En cada lote tuvimos 10 ratas, entonces tenemos el promedio del comportamiento para cada tratamiento con el mismo peso y la misma edad y raza. Seleccionamos ratas machos para tener una influencia del control del sexo y fue un estudio que estadísticamente fue representativo. En los próximos días esperamos publicarlo para hacer una contribución a la comunidad científica.
AIC: ¿Cómo se induce la diabetes en las ratas?
JCR: Se hace bajo condiciones controladas. Se tienen las ratas en laboratorio en edad y con el peso adecuado y se les induce con un fármaco llamado estreptozotocina, que es conocido a nivel mundial para inducir este efecto en los animales y todo se hace bajo condiciones de seguridad adecuadas, en un bioterio que está en las condiciones para desarrollar este tipo de estudios y fue en uno certificado.
AIC: ¿Qué propiedades identificaron en el aguamiel?
JCR: Se hizo un análisis y encontramos diferentes azúcares complejos que habíamos identificado en otros estudios que ya se habían hecho analizando la savia o el extracto de las pencas de diferentes familiares de magueyes. Se trabajó principalmente con el maguey, como el Agave, del cual se obtiene el tequila y ahí se han encontrado otros compuestos que se han denominado fructosacáridos y algunos de estos muy semejantes que encontramos en el aguamiel de este maguey que se utiliza para producir pulque, pero encontramos varios de estos fructosacáridos que no han sido reportados en la literatura y no pudimos identificarlos y también es otra parte que queremos realizar en los próximos meses.
Es posible que algunos de estos compuestos sean responsables del efecto benéfico o la suma de todos los compuestos, no lo sabemos. Algunos de los azúcares que se han encontrado se ha reportado que pueden tener cierto efecto benéfico o algunos otros carbohidratos como la inulina. Pero en este aguamiel encontramos muy bajas grasas, algo que no suponemos que sea responsable del efecto benéfico.
Lo que sabemos del aguamiel es cómo se obtiene y lo que contiene; en el centro de la república se utiliza para hacer pulque y produce un efecto benéfico, aunque la población en general ya había manifestado su conocimiento empírico que tomando aguamiel fresco, las personas diabéticas por alguna razón sentían un bienestar, ahora nosotros con un conocimiento científico atribuimos que este bienestar muy posiblemente es derivado a que se controlan o disminuyen sus niveles de glucosa en la sangre.
AIC: ¿Cuál podría ser el uso del aguamiel con este descubrimiento?
JCR: En este momento son estudios básicos, pero es posible que a partir del aguamiel se pueda tener una bebida para poder administrarse en las personas con diabetes para que ellos controlen los niveles de glucosa en su sangre y tengan bienestar.
Por otro lado, se podría tener una bebida para que los diabéticos puedan utilizarla como un edulcorante para diferentes alimentos, no solamente tomarla, para satisfacer las necesidades que tienen las personas diabéticas de tener contacto con algo dulce y a partir de esto puedan utilizarlo para acompañar otros alimentos y podríamos nosotros —o alguna otra empresa— deshidratarlo y tener el aguamiel en polvo para elaborar diferentes tipos de alimentos propios para diabéticos, como por ejemplo chocolates, y en lugar del azúcar agregar el aguamiel en polvo en pasteles, galletas y todo aquel alimento que se le tenga que colocar edulcorante pero que no haga daño.
También se abre un gran campo en la investigación, pues hay que conocer si efectivamente los constituyentes del aguamiel podrían regenerar el tejido del páncreas y si es así, conocer cuáles son los mecanismos que se están llevando a cabo para que las células empiecen a regenerar el mismo, y si no es así y hay un efecto benéfico, conocer de qué manera los elementos del aguamiel están desarrollando la glucosa en sangre.
AIC: ¿Para las personas que no padecen diabetes también produce un efecto positivo?
JCR: Es posible, nos hemos enfocado en personas que tienen algún tipo de diabetes con un nivel alto de glucosa en la sangre, aunque hay personas que no son diabéticas pero que tienen algo que se conoce como el síndrome metabólico y algunos investigadores le llaman a esto la prediabetes, pero es erróneo y el síndrome puede darse por diferentes factores, pero también a estas personas podría ayudarles a controlar niveles de glucosa. En las personas sanas no lo hemos valorado, pero pudiera ser que también tuviera un efecto benéfico.
Pudiera ser que sirviera como un edulcorante y podría usarse a partir del aguamiel para evitar los posibles daños que le podría provocar a una persona y como una medida preventiva, pero habría que valorarlo todavía.
AIC: ¿Buscan patentar este proyecto?
JCR: Sí, hay muchas áreas que podrían surgir no solamente en la investigación, sino como una fuente de empleo, y el objetivo de esta solicitud de patente ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) es tener una empresa a partir de la cual se pueda generar una bebida primordialmente del aguamiel y que sea una empresa de base tecnológica, de tal manera que se continúe con la investigación y se genere más información para producir a mediano o largo plazo un fármaco del aguamiel.
Si es posible, crear una empresa que sea medianamente rentable y el conocimiento transferirlo a una empresa de mayor capacidad para una mayor producción, y esto generaría no solo fuentes de empleo, sino también la necesidad de tener aguamiel, lo cual nos llevaría a que las personas del centro del país productoras de este tipo de maguey como Tlaxcala, Hidalgo, Puebla, Estado de México, Querétaro, empezaran a cultivar más el maguey, algo que se está perdiendo y que está en riesgo porque ya no es negocio, y sería un rescate y una reforestación para el país.