Con motivo del Día Internacional de la Biodiversidad Biológica, que se celebra
este 22 de mayo, Pablo Ramírez, coordinador de la Campaña de Calidad del Aire de Greenpeace México, dijo que la urgencia de la preservación debe estar acompañada de medidas contundentes para mitigar el cambio climático.
En entrevista, el especialista destacó que, una de las principales afectaciones a nivel planetario es la pérdida de especies, por las modificación de las condiciones de los ecosistemas.
En este marco, alertó, “lo conmemoraremos en un contexto bastante desfavorable. Los científicos nos advierten que estamos a un paso de una megaextinción y las condiciones ecosistémicas para la mayoría de las especies están siendo muy desfavorables. Nuestro clima está cambiando de una manera extrema”.
La preservación de la vida será complicada; para confirmarlo basta ver las condiciones en los polos, donde los osos cada vez están teniendo que migrar más y más lejos. Tenemos casos de osos polares en ciudades en busca de alimentos, apuntó.
Pablo Ramírez consideró que “el principal responsable del cambio climático son las emisiones que genera la quema de combustibles fósiles. Es muy importante que podamos cambiar y dejarlos atrás”.
“El hecho de la transición energética hacia energías renovables, que podamos cambiar la manera en que nos movemos en nuestras ciudades, requiere de políticas transversales en todos los países, porque este esfuerzo requiere medidas que se interconecten en todos los países del mundo.
Requerimos, enfatizó, empezar a adoptar medidas urgentes para mitigar los contaminantes, incluida la industria, una de las principales causantes de los gases de efecto invernadero.
En ese sentido, señaló que los procesos tienen que ser más eficientes, deben integrar las energías renovables en los modelos productivos y reducir la quema de combustibles fósiles en el sector transporte.
Mencionó que la pérdida de la biodiversidad es preocupante. “En México tenemos un ejemplo muy tangible, el de la vaquita marina, que está en términos biológicos funcionalmente extinta. Es algo que tenemos muy cercano, pero hay casos diversos en todo el mundo”.
Destacó que si bien queda claro que las acciones deben venir desde el gobierno, lo cierto es que los ciudadanos también pueden hacer algo, por ejemplo, en cada kilómetro de caminata o que las personas andan en bicicleta, se colabora con la mejora de la calidad del aire.
El representante de Greenpeace expuso “necesitamos actuar con urgencia, un claro ejemplo son los incendios que ocurren ahora mismo. Este es uno de los síntomas que los expertos ya nos advertían: los fuegos serán cada vez más frecuentes e intensos”.