El estigma es una asociación negativa entre una persona o grupo de personas que son etiquetadas, estereotipadas o discriminadas.
El miedo es la primera reacción que se produce socialmente ante una enfermedad desconocida como lo es el COVID-19. Este miedo en un primer nivel es bueno porque nos conduce hacia cambios positivos ya que alerta a las personas sobre la necesidad de cambiar nuestros hábitos para asegurar una mayor protección, por ejemplo, ahora hemos aprendido a lavarnos bien las manos. Sin embargo, cuando el miedo supera nuestra capacidad de enfrentarlo nos paraliza, y por otro lado lo asociamos con el otro, en este caso con las personas enfermas y sus cuidadores. Contra ellos surge un estigma, explicó la psicóloga mexicana María Elena Medina-Mora Icaza.
“El estigma es una asociación negativa entre una persona o grupo de personas que son etiquetadas, estereotipadas o discriminadas y reciben un tratamiento diferenciado debido a la percepción de un vínculo entre ellas y una enfermedad y esto es lo que pasa con el personal de salud”, argumentó la especialista en epidemiología y factores psicosociales.
El miedo es generado por la incertidumbre, así que combatamos eso con información verdadera respalada en hechos científicos, difundamos información que no confunda, necesitamos un acuerdo con los medios para difundir mensajes consistentes basados en ciencia que sean verídicos. “La violencia hacia el personal de salud disminuye cuando también lo hace la discriminación, el estigma, y se aumenta la información, el cuidado del lenguaje, hablemos pues de personas, no de casos sospechosos, infectados o propagadores.”, sugirió la exdirectora general del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, durante la charla “Los nuevos héroes: sin ellos no hay futuro” para la sección Conversaciones del portal “Ciencia y el coronavirus”, la cual puedes ver en el siguiente enlace:
https://www.youtube.com/watch?v=sYSogz4p3OI
Por ello, dijo, hay que cuidar la salud del personal de salud pues también pueden tener miedo, estrés y ansiedad por estar expuestos directamente a pacientes con COVID-19. Las lecciones de China, Italia y España nos enseñan que tener protocolos establecidos dentro del sistema de salud va a permitir que el personal de salud esté menos estresado y pueda ejercer mejor su trabajo.
Los cuatro ingredientes que lo complican todo
Si bien, la incertidumbre es la principal detonadora del miedo, la falta de confianza, la violencia y la pobreza aumentan esta falta de certeza. De acuerdo con la doctora Sara Sefchovich Wasongarz, investigadora del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, estos son los elementos que están causando las reacciones violentas. “No las justifica pero puede explicarlas”, mencionó en entrevista para el Foro Consultivo Científico y Tecnológico A.C.
Todos estos elementos, añadió, fueron construidos a lo largo de los últimos años en la historia de México, lo que hace difícil controlar estas reacciones violentas en la sociedad con pequeñas acciones –opinó la experta en sociología e historia de la cultura-. Además, porque en México nos gusta mucho la violencia y buscamos cualquier pretexto para poder ejercerla, es una manera de funcionar que no se presenta únicamente en los momentos de crisis como este.
Además, hay un problema muy serio porque los medios de comunicación han sido sistemáticamente devaluados y descalificados lo que ha derivado en una polarización social entre quienes desconfían de ellos, y otros que pensamos que los medios tienen la función de mantenernos informados.
Así, lo que necesitamos es un gobierno que nos de la confianza y seguridad de que México está preparado para afrontar esta pandemia con información verdadera y sin cambios de opinión; y por otra parte que no se aproveche de los momentos de crisis cuando las personas están más nerviosas y atemorizadas, para destruir instituciones o proyectos de ciencia que funcionaban bien, bajo la bandera de corrupción. “Todos los mexicanos estamos en el mismo barco y nos importa este país, simplemente queremos información verdadera que no abone a la confusión ni al miedo”, concluyó la doctora Sefchovich Wasongarz.
Pie de foto: El miedo es la primera reacción que se produce socialmente ante una enfermedad desconocida como lo es el COVID-19: María Elena Medina Mora.
Foto: FCCyT.