BERLIN, 6 jul -- La compañía biotecnológica alemana, CureVac, recibirá un préstamo de 75 millones de euros (85 millones de dólares) del Banco Europeo de Inversiones (BEI) para desarrollar vacunas y ampliar la producción de la compañía, señaló una declaración conjunta del BEI y CureVac publicada hoy.
CureVac, con sede en Tubinga, actualmente lleva a cabo una primera prueba clínica de su vacuna contra la COVID-19 en Alemania. En junio, la compañía se convirtió en la segunda empresa biotecnológica después de BioNTech en recibir permiso para la prueba clínica de una vacuna contra el coronavirus en Alemania.
"La única forma de poner fin a la dramática situación que el mundo está enfrentando desde el inicio de la pandemia de COVID-19 será contar con una vacuna segura y efectiva" , dijo Ambroise Fayolle, vicepresidente del BEI a cargo de innovación y salud.
El financiamiento del BEI será otorgado en tres tramos de 25 millones de euros hasta "completar las metas definidas previamente" , según la declaración. La transacción fue financiada como parte de un programa de investigación e innovación de la Unión Europea.
"El coronavirus estará con nosotros mientras no tengamos una vacuna contra él. Por esta razón nuestro trabajo en este frente, junto con el de actores internacionales, es tan crucial" , indicó Mariya Gabriel, comisaria europea de Innovación, Investigación, Cultura, Educación y Juventud, en un boletín de prensa emitido hoy por la Comisión Europea y el BEI.
"Con nuestro apoyo a CureVac, aceleramos nuestros esfuerzos para encontrar soluciones seguras y efectivas para todos en Europa y en todo el mundo" , añadió Gabriel.
A mediados de junio, el Ministerio de Asuntos Económicos y Energía de Alemania anunció que el Gobierno invertiría 300 millones de euros en CureVac para apoyar su desarrollo y sus proyectos.
"La tecnología de CureVac tiene el potencial para desarrollar nuevas vacunas y modalidades de terapias disruptivas que sean accesibles para muchas personas y que estén disponibles en el mercado" , dijo el ministro alemán de Asuntos Económicos y Energía, Peter Altmaier, al anunciar la inversión.