ESPAÑA, 17 de enero de 2022.--El asteroide (7482) 1994 PC1, con un diámetro de un kilómetro, se aproximará a nuestro planeta el 18 de enero de 2022, pero lo hará a
casi 2 millones de kilómetros de distancia. Aunque está catalogado como potencialmente peligroso, en esta ocasión no supone ningún riesgo, según los expertos de la NASA y la Agencia Espacial Europea (ESA).
“El asteroide cercano a la Tierra 1994 PC1, de aproximadamente 1 km de ancho, es muy conocido y ha sido estudiado durante décadas por nuestros expertos en defensa planetaria. No te preocupes, pasará con seguridad por delante de nuestro planeta a 1,2 millones de millas (casi 2 millones de kilómetros) el martes 18 de enero”.
Este es el mensaje que ha puesto en su cuenta de Twitter la Oficina de Coordinación de Defensa Planetaria de la NASA, encargada de detectar, rastrear y caracterizar objetos cercanos a la Tierra (NEO, por sus siglas en ingles) para mitigar sus posibles impactos futuros.
El asteroide (7482) 1994 PC1 fue descubierto el 9 de agosto de 1994 por el astrónomo Robert H. McNaught desde el Observatorio de Siding Spring, en Australia. Desde entonces, y muy especialmente durante los últimos meses, los expertos lo han seguido de cerca para confirmar que su aproximación de este martes, viajando a unos 19,56 km/s, no supone ningún peligro.
Otro asteroide se aproximará en mayo
De hecho, ni siquiera está incluido en la Lista de Riesgo del NEO Coordination Centre (NEOCC, Oficina de Defensa Planetaria) de la ESA, un catálogo con todos los objetos para los que se ha calculado una probabilidad de impacto distinta de cero. En ella sí figura, por ejemplo, el asteroide 2009 JF1 (de unos 13 metros de diámetro), que se aproximará en mayo también a la Tierra y sin peligro.
“1994 PC1 no está en la lista porque no tiene ninguna probabilidad de impacto durante el próximo siglo, sin embargo, 2009JF1 es mucho más pequeño, pero tiene una probabilidad muy baja de impactar contra la Tierra, y por eso está incluido”, explica a SINC Luca Conversi, director del NEOCC .
Los asteroides potencialmente peligrosos (PHA en inglés) se consideran como tales cuando su distancia mínima de intersección orbital es de 0,05 unidades astronómicas o menos, y su magnitud absoluta (H, un parámetro visual) es 22 o inferior.
En el caso de 1994 PC1, su magnitud H es 16,6, según el centro NEOCC, quien también informa que cuando este 18 de enero pase cerca de la Tierra lo hará a una distancia de 0,01325 unidades astronómicas.
En concreto, a 1.975.054 km (unas 5.138 distancias lunares) en el momento en que estará más cerca de la superficie terrestre: a las 21:49:44 h (hora peninsular española), según las hojas informativas que elabora este centro de la ESA con sede en Italia.
El brillo máximo del asteroide durante su aproximación será de 10,2. Esto significa que, aunque no represente un peligro, los astrónomos profesionales y aficionados podrán aprovechar la ocasión para tratar de observarlo con sus telescopios.
“La mejor oportunidad desde España será la noche del 18 de enero, durante un par de horas después de la puesta de sol”, apunta a SINC el astrónomo Marco Micheli del NEOCC, "sin embargo, su brillo, en combinación con la luna actualmente llena, es tal que se necesitarán telescopios de aficionado, al menos de tamaño moderado, junto con un buen conocimiento del cielo y unos datos precisos y actualizados del objeto en el momento exacto de la observación”.