Río de Janeiro, 30 de octubre 2022: El progresista Luiz Inácio Lula da Silva reiteró este domingo su compromiso con el
medio ambiente y anunció que retomará la protección de los biomas en el país especialmente de la Amazonía, durante su primer discurso como presidente electo tras vencer al ultraderechista Jair Bolsonaro.
"Brasil y el planeta necesitan de una Amazonía viva", dijo Lula en una alocución leída en un hotel en Sao Paulo. En las elecciones más polarizadas de la historia del país, el exsindicalista fue elegido presidente de Brasil en la segunda vuelta de los comicios con el 50,9 % de los votos, frente al 49,1 % de Bolsonaro.
Lula, que asume por tercera vez la jefatura de Estado tras gobernar a Brasil entre 2003 y 2010, ya había tenido que enfrentarse a una de las mayores tasas de deforestación en su primer mandato y logró reducir la devastación de la selva en un 80 %, mientras que en el Gobierno de Bolsonaro la destrucción de la Amazonía aumentó de forma considerable.
"Vamos a combatir toda y cualquier actividad ilegal" en la Amazonía, dijo Lula.
En su discurso, el exsindicalista también destcaó que Brasil está listo "para retomar su papel de liderazgo" en el combate contra la crisis climática.
"Vamos a probar que es posible generar riqueza sin destruir el medio ambiente", aseveró. Las palabras de Lula se dan en momentos en que la selva más extensa del planeta sufre con la devastación de su vegetación nativa con cifras que no se veían desde hace más de dos décadas en el país, un hecho que los ecologistas han atribuido a la falta de controles del Gobierno de Bolsonaro para frenar la minería ilegal, el comercio ilícito de madera o la pesca irregular.
Para Lula, la falta de una fiscalización adecuada en la Amazonía brasileña no solo produce un daño ambiental sino que trae consigo muerte y enfermedades.
"Cuando un niño indígena muere asesinado por la codicia de los depredadores del medio ambiente, una parte de la humanidad muere con él. Por lo tanto, retomaremos el monitoreo y la vigilancia de la Amazonía y combatiremos todas y cada una de las actividades ilegales", dijo el presidente electo.
En 2021 la selva amazónica brasileña perdió más de 13.000 kilómetros cuadrados de vegetación nativa y para este año se espera una cifra similar