Egipto, a 9 de noviembre de 2022: La egipcia Omnia el Omrani ha hecho historia en esta Cumbre del Clima COP27 al
convertirse en la primera enviada para la Juventud del evento internacional, en el que pide que los jóvenes formen parte del proceso de toma de decisiones de manera “significativa” y no solo “simbólica”.
“Necesitamos ser parte del proceso de toma de decisiones, pero tiene que ser de una manera significativa, no simbólica”, dice esta joven cairota de 27 años en una entrevista a EFE desde Sharm el Sheij, donde tiene lugar la conferencia sobre el cambio climático más importante del planeta.
El ministro de Exteriores de Egipto y presidente de la COP27, Sameh Shukri, la designó para trabajar en su equipo, con el objetivo de “mejorar y elevar la participación de la juventud en los procesos de la COP” y deseó que las próximas conferencias también sigan la estela de esta iniciativa.
Los jóvenes, los más afectados
Esto es necesario, según El Omrani, porque la juventud “está recibiendo el impacto más desproporcionado” del cambio climático y son “el grupo demográfico más afectado en la Tierra”.
Y es que, según UNICEF, alrededor de 1.000 millones de niños están en “riesgo extremadamente alto” de ser víctimas de la crisis climática, mientras que más de un millón mueren cada año por razones ambientales, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por este motivo, también este año hay por primera vez un pabellón especialmente dedicado en la COP27 a la Juventud y la Infancia.
A día de hoy hay en este planeta 1.200 millones de personas entre 15 y 24 años, lo que representa el 16 % de la población total mundial, según Naciones Unidas.
Camino por recorrer
Su trabajo se centra en guiar a los jóvenes, que ahora cuentan con un altavoz y presencia en la presidencia de la COP27, para que sus peticiones, preocupaciones y propuestas sean escuchadas.
Además, los días previos a la COP tuvo lugar la Conferencia de la Juventud (COY), que reunió a más de mil jóvenes de 149 países con el objetivo de educar y comprender los “procesos complicados” del evento sobre el cambio climático e integrar las demandas de los jóvenes.
“Algo que me gustaría ver es más jóvenes en la COP, no solo como observadores o sociedad civil -que también son importantes porque necesitamos mantener nuestra independencia- pero también tener delegados de la juventud oficiales que representen a sus países”, afirma.
Esto representaría también una solución a los varios problemas administrativos a los que se enfrentan los jóvenes, como conseguir una acreditación, asegura.
Una COP sin Greta
La popular activista e icono joven de la lucha contra el cambio climático, Greta Thunberg, decidió boicotear este evento y no acudir a la cumbre, al considerar que Egipto no respeta los derechos humanos más básicos.
Uno de los temas que están centrando más atención durante la conferencia es la campaña para pedir la liberación de Alaa Abdelfatah, un destacado activista egipcio que inició una huelga de agua desde prisión -donde permanece desde 2019- al inicio del evento para protestar contra su encarcelamiento, algo que ha levantado mucha preocupación por su vida.
“Es una decisión personal el hecho de compartir lo que se siente sobre nosotros (Egipto), sobre la COP o sobre los derechos humanos”, opina sobre el boicot El Omrani, que considera que eventos como este representan una gran oportunidad que requiere “todas las manos a la obra”.
Para ella, la cuestión climática no se puede separar de los derechos humanos porque “es lo mismo”, y asegura que aunque Greta y otros activistas hayan boicoteado esta edición de la COP, “eso no significa que su trabajo, su activismo y su influencia no estén”.
“Por parte de Egipto y de la COP, desde el día uno estamos trabajando duro para que la conferencia sea un espacio seguro e inclusivo para cualquier persona que quiera alzar su voz”, sentencia.