Japón, 17 de agosto 2023—Desde el devastador tsunami de 2011, los reactores destruidos requieren ser
mantenidos fríos, generando unas 170 toneladas diarias de agua de refrigeración. Sin embargo, la capacidad de almacenamiento de agua de refrigeración filtrada se ha alcanzado su límite. Por eso, tras pasar por un proceso de filtración, el agua de refrigeración -considerada inofensiva- se verterá en el océano Pacífico a través de un túnel de un kilómetro de longitud. Los residuos altamente radiactivos permanecerán en tierra. Se estima que el vertido durará 30 años. Los restos altamente radioactivos permanecen en tierra. Según el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), el impacto en las personas y el medio ambiente sería "insignificante".
::: ¿Cómo se trata el agua? :::
Previamente a su vertido, tanto el agua de refrigeración como las aguas subterráneas contaminadas son sometidas a un proceso de filtración mediante el Sistema de Procesamiento Líquido Avanzado, conocido como ALPS (Advanced Liquid Processing System). Este sistema es capaz de filtrar 62 radionucleidos, a excepción del isótopo radiactivo tritio. En vista de esto, Tokyo Electric Power Company (Tepco) tiene la intención de diluir el agua hasta lograr una concentración de tritio de alrededor de 1.500 becquereles por litro, lo que representa menos de una cuadragésima parte del estándar nacional de seguridad. Si los niveles superan el umbral tras el proceso de filtración, se repetirá el proceso de purificación, según asegura Tepco.
::: ¿Cuán peligroso es el tritio? :::
El tritio residual es un isótopo del hidrógeno. A pesar de su radioactividad, su potencial de peligro es considerablemente menor en comparación con el cesio 137 o el estroncio 90. Dado que el tritio emite una radiación beta suave, una simple lámina de plástico o la piel humana pueden atenuar gran parte de la radiación.
Según el radioecólogo Prof. Dr. Georg Steinhauser, verterlo al mar es, por tanto, la opción más adecuada. "Quien esté preocupado por el tritio no está suficientemente informado. El tritio no supone ningún peligro para las personas o el medio ambiente si se diluye lentamente en el mar", afirma Steinhauser.
::: ¿Intentan distraer los responsables? :::
De acuerdo con Greenpeace, el gobierno japonés y Tepco intentan restar importancia a los niveles de radiación y desviar la atención hacia el tritio, menos peligroso, con el fin de distraer de los otros radionucleidos que permanecen en el agua incluso después del proceso de purificación.
"El gobierno japonés ha hecho un gran trabajo llamando la atención de los medios de comunicación y del público nacional sobre el tritio en el agua, y afirmando que no supone ningún peligro para el medio ambiente", declaró a DW Shaun Burnie, experto nuclear de Greenpeace. "El agua contaminada contiene muchos radionucleidos que sabemos que afectan al medio ambiente y a la salud humana, incluido el estroncio-90", afirma Burnie.
::: ¿Cuáles son las alternativas? :::
La única alternativa al vertido del agua en el océano sería la instalación de tanques adicionales, o evaporar el agua de refrigeración. Sin embargo, Steinhauser no considera que tanques adicionales sean una buena idea. Sobre todo teniendo en cuenta el elevado riesgo sísmico de la zona. "Si estos tanques tienen fugas y el agua se filtra a las aguas subterráneas, este tritio se esparcirá en el horizonte de aguas subterráneas en una cantidad relativamente pequeña de agua y no se diluirá mucho".
También existe la opción de calentar agua que contiene tritio y dejar que se evapore. Sin embargo, muchos investigadores consideran problemática la vaporización, ya que es más difícil controlar el hidrógeno radiactivo liberado en el aire, y el viento podría transportar la nube radiactiva a zonas lejanas.