Los investigadores Francois Englert, de Bélgica, y Peter W. Higgs, de Reino Unido, ganaron el Premio Nobel de Física 2013 por su trabajo en la teoría del llamado Bosón de Higgs.
El científico británico, padre del Bosón de Higgs que lleva su nombre, es el creador de la teoría en la que afirma que gracias a la ya conocida como “partícula de Dios”, la materia adquiere su masa, alrededor de lo cual se creó el Modelo Estándar que rige la Física del universo tal y como lo conocemos.
En julio de 2012 el experimento para confirmar la existencia del Bosón conocido como la Partícula de Dios, fue realizado en el Gran Colisionador de Hadrones (LCH), momento que ha marcado la historia de la física moderna pues es la última pieza que falta del denominado Modelo Estándar que podría describir las partículas que conforman el cosmos, sus interacciones y finalmente su origen.
El LHC es un túnel de 27 kilómetros de circunferencia a una profundidad de 100 metros ubicado en la frontera de Suiza con Francia, en cuyo interior se llevan a cabo millones de colisiones de partículas los cuales son estudiados por los experimentos ALICE, ATLAS, CMS y el LHC con el objetivo de dar respuesta a preguntas sobre el origen de la materia y del universo.
Además, la existencia del Bosón de Higgs viene a confirmar lo que los científicos reconocen como la rotura espontánea de la simetría.
La explicación a grandes rasgos señala que para que funcione el Modelo Estándar, las leyes físicas deben cumplir una simetría que permite el orden que hay en la naturaleza y que sigue principios muy básicos. Pero tiene un problema: para que eso sea cierto los cuerpos no deben tener masa y eso está en flagrante contradicción con lo que observamos en el Universo.
Por ese motivo, Peter Higgs con su teoría explica la existencia de un mecanismo que se puede describir como un campo invisible presente en todos y cada uno de los rincones del universo. Ese campo es el que hace que las partículas que lo atraviesan tengan masa.
El bosón de Higgs es el componente fundamental de ese campo, de la misma manera que el fotón es el componente fundamental de la luz.
Entre otros galardones, Higgs ha ganado el premio al Descubrimiento del Año de la revista Science y compartió con Englert el Premio Prícipe de Asturias de Investigación Científica.
Según citan sus biógrafos Higgs nació en Newcastle upon Tyne. Su padre era un ingeniero de sonido que trabajaba en la BBC.
Más tarde, a causa de la Segunda Guerra Mundial, experimentó nuevos cambios de residencia y, como consecuencia, Higgs perdió bastantes clases de la enseñanza básica, teniendo por ello mucha formación en su casa.
Cuando su padre fue destinado a Bedford, Higgs se quedó con su madre en Bristol, ciudad en la que se asistió a la Escuela de Gramática, donde fue inspirado por el trabajo de uno de los alumnos de la escuela, Paul Dirac, padre de la mecánica cuántica moderna.
A la edad de 17 años, Higgs se cambió a la City of London School, donde se especializó en matemáticas; después prosiguió sus estudios en el King’s College de Londres donde se graduó en Físicas con el mejor expediente y, con posterioridad, realizó un curso de posgrado y un doctorado.
Llegó a ser colaborador de investigación Senior en la Universidad de Edimburgo; tuvo varios puestos en la University College London y el Imperial College London antes de ser catedrático en matemáticas en el University College London.
Volvió a la Universidad de Edimburgo en 1960 a tomar posesión del puesto de catedrático en física teórica, permitiéndole establecerse en la ciudad en donde se enamoró siendo todavía un estudiante.
Por su parte el físico Englert nacido en Bélgica 6 de noviembre de 1932, se graduó como ingeniero eléctrico-mecánico en 1955 de la Université Libre de Bruxelles (ULB), donde obtuvo su doctorado en ciencias físicas en 1959. Desde 1959 hasta 1961, trabajó en la Universidad de Cornell, primero como investigador asociado de Robert Brout y luego como profesor adjunto.
A continuación, regresó a la ULB, donde se convirtió en un profesor universitario y se unió allí a Robert Brout. A partir de 1980 ellos encabezaron el grupo de física teórica. En 1998 se convirtió en Emeritus.
En Ginebra los científicos del CERN aplauden este merecido premio y se congratulan por haber contribuido a que se confirme la existencia del Bosón tan ansiosamente buscado.