Los sentidos sensoriales nos permiten relacionarnos con el medio, el oído, tacto, olfato, vista y gusto son los cinco sentidos que tenemos, todos son importantes y esenciales aunque quizá al que más apreciamos es la vista ya que con él podemos relacionarnos con las cosas a más distancia que los anteriores.
Es entonces cuando viene la pregunta clásica, ¿hasta dónde podemos ver? La cual es una pregunta mal hecha ya que no es nuestra vista la que viaja como se creía antiguamente sino que deberíamos preguntar cuál es la sensibilidad de nuestro ojo ya que lo que vemos depende de la intensidad de luz de la fuente y de la sensibilidad de nuestros ojos.
La astronomía no existiría si las fuentes luminosas más allá de la atmósfera no lograran afectar nuestro sentido de la vista. El Sol es el cuerpo celeste más brillante del cielo y nos parecería impensable que no pudiéramos ver su luz, sin embargo debemos tomar en cuenta que se encuentra a 150 millones de kilómetros de nosotros. Permítanme hacer un ejercicio, por ejemplo: si una vela ilumina 1 candela (cd) un foco de 100 watts (W) ilumina el equivalente de 130 velas o 130 cd, la luminosidad de ese foco va disminuyendo a medida que lo alejamos con un valor igual al inverso al cuadrado de la distancia que nos separa, a 2 metros brillara solo como 32.5 cd; a 3 metros con 14.4 cd; y a 5 metros brillaría tanto como 5 velas y a 11.4 metros será igual que una vela. De la misma forma una fuente que a la distancia de 150 millones de kilómetros brille como brilla el sol simplemente es una fuente de luz que no logramos comprender.
El que podamos ver estrellas que se encuentran a miles de millones de kilómetros de distancia significa que esas estrellas brillan con una intensidad enorme, muchas de esas estrellas son mucho más brillantes intrínsecamente que nuestro Sol. Ahora bien, el objeto más brillante que logramos observar a simple vista no es una estrella sino un conglomerado de cientos de miles de millones de estrellas y se llama Galaxia de Andrómeda, se encuentra a más de 2 millones de años luz, NO son kilómetros, sino la distancia que viaja la luz durante 2.5 millones de años. En kilómetros serían 23,652,000,000,000,000,000 precisamente para evitar escribir tantos ceros es que se utiliza el año luz como medida de distancia, la luz recorre casi 9.46 billones (millones de millones) de kilómetros en un año. Otros cuerpos celestes más distantes solo podemos verlos con instrumentos como prismáticos o telescopios. El pasado 2 de febrero algunos afortunados pudimos observar con telescopio el brillo de una estrella a más de 12 millones de años luz, esto solo es posible cuando la estrella explota con una fuerza tan grande que llega a brillar más que la misma galaxia que la contiene. Este tipo de eventos los conocemos como supernovas, desde el invento del telescopio no ha habido una supernova en nuestra galaxia.
@SergioUniverso