El jefe de la oficina de seguridad de la empresa CoroNet, Dror Liwer, ejemplificó que la zona de Times Square en Nueva York es uno de los principales sitios donde se observa esta problemática por el gran flujo de visitantes, sin embargo, los cibernautas poco se preocupan de esto.
Este punto turístico de Estados Unidos, y uno de los más grandes del mundo, tiene un alto número de ataques que buscan robar información sobre tarjetas de crédito o identidades.
CoroNet es una compañía que desarrolló una tecnología que detecta y mapea dónde existen puntos de conectividad, identifica cuántos dispositivos hay en esos puntos y dónde se producen ataques; está enfocada en proteger las terminales inalámbricas de estos riesgos, según la actividad que tenga una sociedad.
Esta firma está apoyada por el grupo de capital privado JVP, con base en Israel, dedicada a financiar start-ups o empresas de arranque o nacientes, que desarrollan soluciones enfocadas a la seguridad cibernética.
El socio de JVP Cyber Labs, Nimrod Kozlovski, resaltó que hasta ahora este fondo ya destinó más de 18 mil millones de dólares en diferentes compañías, 12 de las cuales ya hicieron una oferta pública inicial en el Nasdaq de Estados Unidos.
Añadió que cada vez hay una mayor conectividad entre un número más grande dispositivos, lo cual también implica un riesgo para los usuarios, no obstante, lamentó que pocas empresas y personas, incluso desarrolladores de tecnología, no consideran el tema de la seguridad.
En este sentido, consideró que se pudo evitar el robo de datos que recientemente enfrentó el portal Ashley Madison, sitio de encuentro para infieles, donde los hackers publicaron la lista de los usuarios.
“Todas las vulnerabilidades que presentó la compañía tenían solución, la tecnología existe pero la compañía falló al proteger la información de sus usuarios, por ejemplo, su proceso de autenticación. Hoy se puede asegurar la identidad de alguien sin necesidad de almacenar los datos de los usuarios”, explicó Kozlovski, quien fue Oficial del Ejército.
Beer Sheva se encuentra en el desierto, cerca de una base militar israelí, pues de esta actividad militar surgen muchas ideas o proyectos tanto para defensa como ataque, y en esta ciudad habitan hasta ahora 1.3 millones de personas pero se estima que en una década habrá más de 10 millones.