Sharenting es una nueva tendencia que amenaza la privacidad y seguridad digital de los hijos, y todo por la necesidad de
los padres de compartir detalles de su vida, sin embargo, existen iniciativas como la campaña #YoCuidoMiHuella, que enseña a tomar precauciones al respecto.
De acuerdo a la BBC, "sharenting" -un anglicismo que proviene de share (compartir) y parenting (paternidad)- o también conocida como “crianza en línea”, “consiste en documentar las primeras sonrisas, palabras, pasos... y cada una de las anécdotas de los más pequeños, en Facebook, Instagram y otras redes sociales”.
En una época donde las generaciones acostumbran documentar y compartir los hitos importantes de su vida, nace la discusión de si es ético o no, publicar fotos de los niños y niñas en las redes sociales. Quienes están en contra utilizan como argumentos que el publicar estas imágenes puede provocar futuros adolescentes avergonzados, y además, expuestos innecesariamente al ciberbullying y a fraudes digitales.
Así lo indica la Universidad de Michigan, que señala que el 56% de los progenitores suben fotografías potencialmente vergonzosas de sus hijos, “que puede afectarles durante su adolescencia o incluso en su etapa adulta, interfiriendo en su vida social y laboral”.
Una investigación realizada por Barclays revela que el 82 % de los padres comparten información personal en línea, y el 30 por ciento de los padres incluyen información personal, como los nombres de los niños en sus contraseñas. Lo cual podría generar hasta 7,4 millones de casos de fraude de identidad en línea para 2030. De hecho, la empresa calcula que el sharenting podría costar más de US$870 millones en fraudes en línea, siendo responsable de dos terceras partes de las suplantaciones de identidad en la próxima década.
Ahora, ¿cómo resguardarnos de esta situación?
“Los primero es ser conscientes de que todo lo que hacemos en internet deja una huella”, señala Jaime Herreros, experto en Ingeniería e Informática y CTO o Director de Tecnología de la empresa multinacional, Colegium. "Hoy nos conectamos tranquilamente a cualquier red inalámbrica y entregamos datos respecto a nuestras vida y la de nuestros seres queridos, sin sospechar que todo el tráfico puede ser interceptado y analizado. Por esto es muy importante que aprendamos a cuidar nuestra seguridad en la red: configurando la privacidad de las redes; no entregando nombres o geolocalizaciones propias ni de sus hij@s; reforzando las claves y auditando regularmente las cuentas de redes sociales".
Además, Colegium elaboró un programa de clases gratuitas que busca promover el uso responsable de las redes sociales, previniendo a su vez prácticas peligrosas que puedan atentar a la seguridad de los niños, niñas y adolescentes. Se trata de la campaña #YoCuidoMiHuella y esta puede ser revisada en los colegios o en familia de forma gratuita en el siguiente enlace.