México, 9 de septiembre 2021,-- Para que la economía mexicana pueda crecer por lo menos al 3% anual se requiere de una inversión de
160 mil millones de dólares para nueva capacidad de generación eléctrica, que según la propia secretaria de Energía, Rocío Nahle, requiere de 24 mil 600 megawatts adicionales a los casi 80 mil megawatts que hoy en día tiene el país. El gobierno no tiene capacidad para realizar estas inversiones, por lo que se requiere de la participación de la IP, a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador habló durante su tercer informe de gobierno de una reforma constitucional en materia eléctrica, luego de los múltiples intentos por vías legales que han sido frenados para reducir la participación de los privados en esta actividad.
Así lo explicó a El Economista Óscar Scolari Romero, director general de la empresa desarrolladora de proyectos energéticos Rengen Energy Solutions, quien pide sinergias y no confrontaciones entre el gobierno y la industria privada para llegar a la meta en común de electrificar a todo el país con tecnologías limpias, a precios accesibles y con un Petróleos Mexicanos (Pemex ) y una Comisión Federal de Electricidad (CFE) fuertes.
“El sector público en el mundo no es el mejor administrador y poder contar con experiencia de la IP es una muy buena posibilidad importante para lo que necesita el país tras los graves impactos que ha tenido la economía por la crisis sanitaria”, dijo, “los empresarios no somos el enemigo, esta confrontación que se ha creado solo genera daños cuando es momento de crecer y para ello se requiere de la energía sí o sí”.
Scolari Romero recordó que la actividad económica de un país se mueve con energía, tanto en el terreno de la salud, alumbrado, agua, seguridad y que es el pilar esencial del crecimiento y sostenimiento económico y la creación de empleo.
En la actualidad, el costo más bajo de todas las tecnologías en una nueva construcción eléctrica oscila en 700 dólares por megawatt, ejemplificó. Hace un mes, la CFE con la capacidad de apalancamiento a la que accede como la gran empresa que es en el mundo, solicitó un crédito de mil millones de dólares, con eso, alcanzará para el mantenimiento de su infraestructura pero no para nuevos proyectos, y el país los necesita.
“El gobierno no tiene esos recursos, los necesita para otras prioridades de carácter social, mientras que los privados consiguen cada vez mejores condiciones de créditos en proyectos de energía, siempre y cuando los financiadores tengan garantías de retorno.
Y es ahí donde el gobierno federal puede comprender que se requiere de un diálogo intenso en el que se corrijan los errores y malas prácticas del pasado, para iniciar con relaciones sanas con privados que no abusen de los recursos públicos.
Según el empresario, existen cada vez más solicitudes de parques industriales a los que la generación distribuida ya no les alcanza y buscan mayor consumo para aumentar su producción, pero sin seguridad no es posible.