• Aunque es rápido, fácil de usar y accesible desde cualquier sitio también es frágil; la mensajería tradicional sigue vigente
México, 09 de octubre 2022: Aunque la mensajería instantánea sea reciente, el intercambio epistolar lleva siglos entre nosotros. Desde su aparición, hace unos cuatro mil 400 años, el correo –postal o electrónico– ha representado una importante vía de comunicación entre las personas y los pueblos.
Si bien es cierto que gracias a la aparición de Internet hoy en día contamos con otros medios para comunicarnos en tiempo real, el correo postal no ha cesado su actividad; por el contrario, sigue siendo esencial para el envío de documentos importantes, remesas y mercancías que requieren servicios de entrega.
Además, los principales bancos y empresas, que son los grandes generadores de correo tradicional, no han sustituido del todo sus envíos físicos ya que supondría eliminar una de las formas más importantes de comunicación y vínculo con sus clientes, por ejemplo.
Hugo Sánchez Gudiño, de la Facultad de Estudios Superiores Aragón, considera que la revolución en las comunicaciones que han supuesto las nuevas tecnologías de la comunicación, y dentro de ellas el correo electrónico, ha afectado al físico, aunque de manera relativa, pues la pandemia impulsó un modelo particular de compra y entrega de mercancías y documentos a partir de una combinación entre el uso de Internet y la mensajería tradicional.
También, el profesor de periodismo menciona que si bien las nuevas formas de comunicación dan la posibilidad de generar un correo que permite una mayor interacción de manera instantánea de las personas con sus grupos sociales, las cartas privadas en físico, siempre tendrán un toque especial, más humano y tangible, pues constituyen una práctica de escritura cada vez menos usual.
Diferencias
Con motivo del Día Mundial del Correo que se conmemora el 9 de octubre, el experto en temas como jóvenes y medios de comunicación plantea que el correo postal no sólo es un mecanismo de mensajería que permite la interacción de la ciudadanía con sus seres queridos y grupos sociales, también es una de las formas de cultivar el arte de escribir.
En tanto que el electrónico, aunque ofrece una mayor interacción, es rápido, fácil de usar y accesible desde cualquier sitio, es un medio de comunicación demasiado frágil, “de los millones de correos que todos los días circulan en la red, una parte importante de ellos son basura, noticias falsas”, advierte.
Números
De acuerdo con el reporte Number of email users worldwide 2017-2024 de Statista, en 2020 el número de usuarios mundiales de correo electrónico ascendió a 3 mil 900 millones, y se prevé que en 2024 aumente a 4 mil 48 millones.
Igualmente, dicho informe señala que en 2018 se enviaron y recibieron un promedio de 281 mil millones de e-mails todos los días en todo el mundo y se prevé que para 2023 esa cifra aumente a más de 347 mil millones.
A final de cuentas, muchas personas siguen conectadas mediante el correo tradicional, en particular en aquellos poblados donde Internet aún no ha llegado, ahí la comunicación fluye mediante cartas y documentos enviados por el correo postal, donde se encuentra activo, anota.
Al respecto, según cifras del Servicio Postal Mexicano (SEPOMEX), en el periodo de enero a agosto de 2021 manejó casi 220 millones de piezas, de las cuales 191 millones fueron nacionales y 29 millones internacionales.
El SEPOMEX ofrece cobertura de 97 por ciento de la población, es decir, atiende a más de 122 millones de habitantes en todo el territorio nacional, contando con presencia en 2 mil 233 municipios (en total hay 2 mil 469), con una red de mil 344 oficinas y una fuerza de reparto de más de 7 mil carteros.
Con dicha infraestructura, SEPOMEX maneja casi un millón de piezas diariamente, las cuales son transportadas a través de su amplia red logística compuesta por más de mil 500 rutas y circuitos postales terrestres.
Por último, Hugo Sánchez puntualiza que el correo postal hoy se complementa con la tecnología, pues a partir de ésta hubo una irrupción de empresas privadas en el mundo de la mensajería; implica una combinación de ambas modalidades, para la entrega de paquetería y documentos, actividad que con la pandemia por la Covid-19 se intensificó