México.- Luego de 11 años en pantalla, el programa El almohadazo, que conduce la periodista y locutora
Fernanda Tapia, en MVS Televisión, llega a su fin, en medio de la crisis generada por la pandemia de la COVID-19.
En entrevista con Notimex, Fernanda Tapia explica las razones de la cancelación de la emisión, que disfrutaba de una "buena aceptación entre el público". La también actriz de cabaret dice que "simplemente se acabó el dinerito para hacer el programa. Lo que no lograron hacer los gobiernos panistas y priístas, ni la pandemia del H1N1, lo consiguió la crisis económica. Ha sido un año y cacho, muy difícil para los empresarios".
Comenta que ella no es empresaria, "no me puedo llamar tal, pero simplemente sostener a los empleados que tengo, me ha costado un chorro de trabajo. Lo que a nosotros nos explicaron –en la televisora-, y que me suena muy lógico, es que a fines del años pasado hubo un gran recorte en MVS, como en otras empresas de medios. En 'Almohadazo' nos dijeron ´vamos a bajar los sueldos, ni modo ¿le entran?, y le entramos", afirma la locutora.
Abunda que todo mundo se puso la pilas "y sacamos el proyecto todavía varios meses. Pero la verdad es que después no enteramos que, muy generosamente, la familia Vargas –dueños de la empresa-, habían estado subsidiando, de sus otras empresas, los tres programas que quedábamos. Nos estuvieron sosteniendo más de tres meses".
Y, para Fernanda, lo peor es que esas otras empresas, restaurantes, tuvieron que cerrar debido a la pandemia del coronavirus. "La verdad es que fueron muy generosos, a los compañeros que estaban por nómina se les pagó lo correcto". Y aclara tajante: "Aquí no hubo ningún pleito, ninguna censura nunca, agradezco a todos el esfuerzo que hicieron para mantenernos hasta el último día".
Tapia, quien también conduce el programa Teleadictos anónimos, en otra estación de radio, dice que fue lamentable dejar la emisión televisiva. "Fue muy triste porque fueron 11 años de estar domando toros, de esos de rodeo, y no nos había tirado hasta ahorita. Sin embargo, tengo fe en que vendrán tiempos mejores y se abrirán otros espacios", comenta.
Argumenta que no hubo pleito alguno: "Reconozco públicamente el esfuerzo titánico que hicieron mis jefes directos, y los dueños. Pero ya no se pudo sostener más, y es una tristeza. Sé que a ellos también les pesa dejar el proyecto. Y no fuimos el único programa, se acabó todo el que era televisión en vivo de la estación. ¡Imagínate la cantidad de gente sin trabajo!", reflexiona.
El Almohadazo, asegura Fernanda, era programa exitoso. "Teníamos picos de rating, de ventas; pero bueno, los comerciales empezaron a bajar y muchos anuncios los generaba el gobierno, en otros sexenios. Sin embargo, seguimos dando la lucha en otros espacios", confía.
Por otro lado, anunció que el concepto de El almohadazo se mantendrá vigente. "Vamos a buscar que no muera, a ver qué se puede hacer. Tenemos la bendición de las redes, aunque hay que aclarar que tampoco son la panacea. Cuesta mucho trabajo sostenerlas", finaliza.