Los Ángeles, California (EE.UU.), 3 de agosto 2020, .- Taylor Swift batió este lunes dos marcas históricas en las listas de éxitos de EE.UU. con su reciente disco "Folkore": Es la primera artista que debuta a la vez en el número uno de álbumes y sencillos, y también es la cantante con más temas en el listado de éxitos a lo largo de su carrera.
Billboard, la entidad que desde hace 62 años mide el rendimiento de la industria musical en Estados Unidos, confirmó además que el disco que Swift lanzó por sorpresa la semana pasada es ya el trabajo más vendido de todo 2020 con 846.000 copias despachadas solo en el país norteamericano.
En todo el mundo, "Folklore" habría vendido más de 2 millones de copias según la discográfica de Swift, Republic Records.
Con esas ventas, y en apenas una semana de existencia, el álbum se colocó en lo más alto de la lista Billboard 200, que mide los discos más vendidos en el país.
Al mismo tiempo, el sencillo principal del disco, "Cardigan", debutó en el número uno del ranking Billboard Hot 100, dedicado a las canciones más escuchadas, un logro que hizo que Swift se convierta en la primera artista que debuta en los más alto de ambas listas en la misma semana.
Asimismo, en esa última recopilación de canciones, Billboard Hot 100, la artista ha batido otra marca histórica: Se convierte en la cantante con el mayor número de temas propios que han formado parte de esa lista, un total de 113 composiciones a lo largo de su carrera.
Con esas 113 canciones, Swift se colocó encima de Nicki Minaj (100), Aretha Franklin (73), Beyoncé (65), Rihanna (62) y Madonna (57).
El octavo disco de Swift, un trabajo mucho más intimista y alternativo que sus anteriores, se anunció con tan solo 15 horas de antelación a su lanzamiento pero ha conseguido unir el aclamo de la crítica con el éxito comercial.
Con una media de sobresaliente en las calificaciones de la crítica, publicaciones especializadas como Rolling Stone, The Guardian y NME han otorgado a "Folklore" notas de 5 y 4,5 estrellas (sobre cinco), y la revista independiente Pitchfork lo elevó al 8 sobre 10.
Según aseguraba la cantante, el disco es el resultado de tres meses de trabajo "en aislamiento", durante la crisis del coronavirus, en el que ella misma escribió y grabó los 16 temas, contando con colaboradores como Aaron Dessner, Jack Antonoff, William Bowery y Bon Iver, con quien canta "Exile".