Durante noviembre y diciembre del pasado 2020, que todos vivimos al filo de la navaja, en el cálido teatro Milán se gestó el montaje de una obra planeada para estrenarse el 26 de diciembre, en medio del ambiente navideño que siempre hace que todo mundo esté más receptivo que nunca.
Sin embargo, la situación con la pandemia se agravó y hubo que posponer las funciones de Pequeñas grandes cosas. Ahora, que el panorama ha comenzado a cambiar, Morris Gilbert ha decidido abrir solamente ocho funciones durante la Semana Santa para dar una “probadita” al público que ya espera esta obra, que sin duda será un paso gigantesco en la carrera de su protagonista.
El calendario de las funciones es el siguiente: miércoles 31 de marzo a las 19 horas; jueves 1, viernes 2 y sábado 3 de abril dos funciones cada día, a las 17 y 19 horas; y el domingo 4 de abril un último prestreno a las 17 horas.
Morris Gilbert, productor de la obra explica en esta carta, los motivos que lo llevaron a llevar Pequeñas grandes cosas a escena. La carta está dirigida al personaje protagónico de la obra.
Querida Sugar:
Antes que otra cosa te quiero agradecer la oportunidad que me das para contarte de este proyecto que he acariciado largamente desde hace al menos dos años.
Se trata de Pequeñas grandes cosas (titulada originalmente Tiny Beautiful Things) que es una obra ideal para conectar con el público en estos momentos tan difíciles que estamos viviendo desde hace meses.
Como tú bien sabes, Pequeñas grandes cosas es un proyecto muy especial para mí por múltiples razones. La primera es porque me ha permitido acercarme al trabajo y la creatividad de un grupo de mujeres maravillosas, destacadísimas cada una de ellas en sus respectivas áreas.
Primero las autoras: Cheryl Strayed y Nia Vardalos; la primera, una prolífica escritora cuyos textos se han traducido a casi 40 idiomas en todo el mundo y se han adaptado tanto para la pantalla como para el escenario; y Nía, una soberbia actriz a quien desde la película Mi gran boda griega tenía ganas de conocer, deseo que ahora se me cumple pero en su faceta como dramaturga.
Luego, otra mujer a quien quiero muchísimo y con quien he tenido el gusto de trabajar en varias ocasiones. Ella es Mariana Garza, quien no sólo será la protagonista de este montaje, sino que además será nuestra anfitriona en el hermosísimo teatro Milán, donde haremos la temporada.
Y por si fuera poco tendré el gusto enorme de trabajar por vez primera con Paula Zelaya, quien es la responsable de la dirección de escena, de la traducción y adaptación del texto. Una teatrera joven, talentosa, entregada que está construyendo una sólida carrera.
Seguramente tú querida Sugar, como yo, sabes que el trabajo en equipo es vital, rinde mejores y más hermosos frutos. Es por ello que para Pequeñas grandes cosas hemos logrado conjuntar el trabajo de gente valiosísima; al mismo tiempo joven y experimentada; talentosa y entregada; responsable y entusiasta…
Mira y dime si no es así:
Además de Mariana Garza, en el elenco están Amanda Farah, Alejandro Morales, Marcos Radosh y Daniel Bretón.
Y en el equipo creativo también contamos con: Daniela García Moreno (escenografía), Cristobal MarYán (diseño de Audio y compositor de música original), María Vergara (iIuminación), Mauricio Rico (movimiento escénico), Fernanda García (vestuario), Karla Baez (directora residente); y Max Antúnez es el productor ejecutivo.
De verdad querida Sugar estoy más que satisfecho por esta puesta en escena, perfecta para los complicados tiempos que estamos viviendo, y perfecta para mí, pues me permite seguir disfrutando del teatro, una de esas pequeñas grandes cosas que dan sentido a mi vida.
Ah, por cierto, casi se me olvida presentarme formalmente contigo; soy…
Morris Gilbert, productor.
Pequeñas grandes cosas, una obra conmovedora, divertida, inteligente, que nos pone frente al gran espejo que es la vida cotidiana.