A 100 años de su nacimiento, José Revueltas (Santiago Papasquiaro, Durango, 20 de noviembre, 1914) volvió a llenar con sus palabras los pasillos y patios del Antiguo Palacio de Lecumberri, que fue y donde actualmente se halla el Archivo General de la Nación. Este sábado 22 de noviembre, más de 250 jóvenes estudiantes de preparatoria participaron en la lectura colectiva de la novela “El Apando”, escrita por el autor nacido durante los dos años y medio que estuvo preso en este lugar que hoy resguarda gran parte de la memoria documental del país.
En el marco de las celebraciones por el Centenario del natalicio del escritor, ensayista y guionista, abrió también sus puertas en Lecumberri la exposición José Revueltas: palabras de tierra y agua, organizada por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta). En la muestra se incluyen aproximadamente 100 fotografías que se suman a cientos de documentos de la vida pública y privada del autor, así como información de sus encarcelamientos y su trabajo como guionista en diferentes películas de la Época de Oro del cine nacional.
“José Revueltas fue, desde muy joven, un luchador social; alguien que apostó por la transformación de nuestro país y lo pagó con la cárcel. A los 16 años estuvo en las Islas Marías y la experiencia de esa etapa fue justamente su primera novela “Los muros de agua” y después se empeñó en ser un artista, un disidente político y una voz independiente”, dijo Ricardo Cayuela, director general de Publicaciones de Conaculta, minutos antes de iniciar la lectura colectiva de la novela que surgió durante el encierro, tras el Movimiento Estudiantil de 1968.
En presencia de Olivia Revueltas, hija del escritor homenajeado, Cayuela subrayó la idea de que la mejor forma de celebrar a un escritor es leyendo su obra por lo que consideró que la lectura colectiva de “El Apando” es el homenaje de mayor valor literario a este autor.
“Si uno analiza la obra de José Revueltas verá que hay dos hitos carcelarios de los que salieron dos grandes novelas: “Los muros de agua”, que redactó cuando estuvo preso en las Islas Marías y “El Apando”, con sus experiencias en Lecumberri. En medio hay una trayectoria literaria espectacular, como poeta, narrador y guionismo de cine. Pero también si uno lee otras de sus obras como “Los días terrenales” y “Los errores” también descubrirá otra cara de Revueltas: la del disidente de la ortodoxia comunista. Fue un disidente de la disciplina y del dogmatismo frente a la verdad”, añadió el titular de Publicaciones del Conaculta.
Juan Ignacio Hernández Mora, Comisionado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Readaptación Social, participó en la apertura de la exposición y dio a conocer a los tres ganadores del Concurso Nacional de Cuento José Revueltas, cuyos participantes son internos de los Centros Federales de Readaptación Social (Ceferesos) de todo el país.
“El arte es una vía de reinserción social donde cada vez hay internos más participativos. Muchos de ellos jamás habían recibido un aplauso o una felicitación y muchos de ellos han participado en obras de teatro, y talleres de dibujo inspirados en José Revueltas y es así como también conocen a la libertad y a la esperanza”, indicó el comisionado.
El primer lugar del concurso fue para una joven interna Lourdes Mayola Narváez Hernández, del Centro Femenil de Readaptación de Tepepan, con el cuento “Obituario psíquico inconcluso”. El anuncio de su premio coincidió con el anuncio de que, tras cumplir con el proceso que enfrentaba, el próximo martes quedará libre. El segundo lugar, con la obra, “Lo que el capitán no supo”, de Mario Alberto Arroyo Caballero, del CEFERESO número 6 sureste, y el tercer lugar del concurso fue para Jesús Carrillo León, del CERESO Número 2 de Occidente.
La exposición “José Revueltas: palabras de tierra y agua” dan cuenta de su infancia y sus hermanos, como el célebre compositor Silvestre Revueltas; su hermana actriz y bailarina Rosaura y su hermano pintor Fermín.
En otra sección dedicada al escritor se habla de su matrimonio con Olivia Peralta y de su hija Andrea, así como de su primera reclusión en las Islas Marías.
En una sección diferente de la exposición se presentan los años en que estuvo casado por segunda ocasión. Se presentan documentos y retratos de su esposa María Teresa Retes y de su hijo Román. También aparecen amigos de él como los escritores Pablo Neruda, Efraín Huerta y Andrés Henestrosa. Se presentan ejemplares de su participación en la revista política “Tricolor”.
Se presentan también fotografías del sepelio de José Revueltas en 1976 y carteles de algunas de las películas en las que colaboró como guionista, como “La diosa arrodillada”, protagonizada por María Félix.
Además de la presencia de Cayuela, y de Hernández Mora, también estuvieron presentes en la apertura de la exposición y en la lectura colectiva María Cortina, en representación del secretario de Cultura del Distrito Federal, Eduardo Vázquez, y Mercedes de Vega, directora del Archivo General de la Nación.