El Lago de los Cisnes, puesta en escena natural que conforma ya una de las tradiciones de los espectáculos organizados por el INBA- Conaculta, regresa en su temporada 39 a la Isleta Menor del Lago del Bosque de Chapultepec, a cargo de la Compañía Nacional de Danza (CND).
La producción que se renovó y fue estrenada con éxito el año pasado arrancará a partir del 26 de febrero y hasta el 29 de marzo, para dar una exhibición del ballet clásico basado en la coreografía de Lev Ivanov y Marius Petipa y la música de Piotr Ilich Tchaikovsky, con toques espectaculares gracias al apoyo de la tecnología.
“Es un espectáculo sui géneris al ser al aire libre. Es único, estimulante y precioso para los espectadores. Cada temporada hay un mejor nivel técnico y un desempeño dancístico más pulido”, aseguró la maestra de la compañía Tihui Gutiérrez, acompañada de los bailarines Argenis Montalvo, Alexander Pineda, Ana Elisa Mena, Blanca Ríos y Diana Angelini.
Destacó que al ser el ballet que más identifica el público, la demanda se ha incrementado al alcanzar una asistencia de 42 mil 700 personas en el 2014, e incluso, los boletos para el primer fin de semana de esta temporada se encuentran agotados.
Entre los atractivos escénicos destaca una pantalla de agua de 17 por 7 metros con proyecciones en 2D que consigue transmitir la magia detrás de esta historia de amor convertida ya en una tradición entre las familias mexicanas.
La proyección de un castillo de 16 metros de alto, 5 mil luces LED alrededor del espacio de 36 metros de largo y 18 metros de profundidad, efectos de sonido, cambios de sonorización, vestuarios más vistosos y pirotecnia.
Todo lo anterior se suma al virtuosismo y estética de los integrantes de la CND, quienes en El Lago de los Cisnes llegan a enfrentarse a las adversidades o inclemencias del clima.