De unos años atrás a la fecha, hemos sabido de personajes que dedican su tiempo y se actualizan en conocimientos en esa búsqueda de una mejor calidad de vida para todos quienes habitamos en el planeta, aunque, teniendo
en cuenta que no es una labor fácil y que los resultados a obtener son a largo plazo, no cesan en su interés. Tal es el caso de un divulgador que esta ocasión quiero presentar a usted amigo lector, él es Alejandro Alonso.
Alex, quien además tiene chispazos de poeta, es un hombre que desde hace más de 25 años ha tomado la Ciencia, la Tecnología, la Cultura ambiental y la prevención en cuanto a enfermedades, como trabajo apasionado para divulgar en los medios electrónicos, " empecé en televisión, en la programación educativa de canales como el Once, y he colaborado en múltiples medios, Canal 22, ILCE, DGTV, SPR, CEPROPIE. La permanencia me ha permitido y obligado a explorar distintas plataformas de comunicación, tanto impresas como electrónicas. En medios impresos he colaborado con el Colegio de México, la jornada, Reforma, el Nacional, además de múltiples revistas" así nos contestó al preguntarle sobre su amplia experiencia y trayectoria. Cabe decir, que actualmente es corresponsal de una revista impresa llamada, Sieteculebras, de Perú, misma que cumple 20 años y es la más longeva en los Andes.
Alejandro Alonso cuenta con "Concordia Mundo" una pequeña empresa dedicada a generar estrategias y alianzas para posicionar la línea temática de la es ya un experto. En alianza con despachos de animación como M31 Médios, Kibalin y Darum Producciones, se encuentra en la producción de series animadas dirigidas a los niños: Órale con la Ciencia, Zoo Chiapas, Ciencia Chida, Metrópolis, entre otros, forman parte de esta gama de posibilidades por las cuales hace llegar a los pequeños la maravillosa Ciencia. "Esto es posible con el patrocinio del Conacyt, la Seciti y de la Red Nacional de Radiodifusoras y Televisoras Estatales", mencionó.
"Mi postura como productor y generador de contenidos, es que todo producto, al fin de cuentas, es una narrativa y como tal posee una historia explotable en términos comunicativos", puede ajustarse a esquemas institucionales pero termina por buscar la manera de romper las convenciones, de propiciar el experimento".
Sobre su posición hacia el trabajo narrativo, dice "implica un ejercicio paralelo que he llevado a cabo por casi 35 años, y es el literario. El Conaculta, Ed. Porrúa, la Secretaría de Cultura del GDF, entre otros, me han publicado poesía, cuento y novela. No formo parte del mainstream literario. Tengo muchos materiales inéditos. Mi posición es mostrar mi particular visión de un mundo que tiene de hospederos al caos y la anarquía, al ritual y al conocimiento", reiteró.
"Me parecen indispensables los vasos comunicantes, cualesquiera que sean. Voy a presentar mi trabajo en dos sesiones diferentes (literatura y animaciones de ciencia) para los reos del Reclusorio Sur, y unos días después estaré en el Templo Sagrado de los Incas, el Q´orycancha, Perú, para dar una plática sobre mi línea de estrategia multimedia; también me invitan a presentar mi novela La Flor azul en ese país, en el II Festival Internacional de Literatura del Cusco".
Sin lugar a dudas, Alejandro es un personaje que tiene mucho que aportar para quienes buscan desde sus trincheras dejar huella en cuanto a la honorable labor de la divulgación de la Ciencia. No resulta sencillo tomarla de la noche a la mañana, "hasta ahora he tratado de mantener ambos perfiles (divulgador o estratega de contenidos y escritor). Estoy por culminar una novela. Boceto de Sombras, cuyo proyecto multi plataforma pretende validar ambas esferas".
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