Con fotografías provenientes de su acervo, el Museo del Estanquillo montó la exposición “Pasado Venidero. Revisiones de la colección fotográfica de Carlos Monsiváis”, que podrá ser apreciada a partir de mañana y hasta abril del 2016.
La exposición presenta el resultado de la revisión del acervo fotográfico del escritor que consta de más de 20 mil piezas, aunque para esta muestra se escogieron sólo poco más de dos mil fotos que datan del siglo XIX y XX.
Durante un recorrido por la muestra, Alfonso Morales, su curador, Beatriz Sánchez Monsiváis, secretaria de la Asociación Cultural del Museo del Estanquillo; Itala Schmelz, directora del Centro de la Imagen, y Henoc de Santiago, detallaron qué podrá encontrar el público en esta muestra que es parte de las actividades del Festival Foto México.
La encargada de inaugurar la conferencia fue la también representante de la familia Monsiváis, Beatriz Sánchez Monsiváis, quien dijo estar muy contenta, ya que es la primera vez que se realiza una muestra exclusiva de las imágenes que el cronista adquirió durante su vida.
Por su parte, Itala Schmelz dijo que con esta exhibición se cierran las actividades del Festival Foto CI México que abordó la reflexión del coleccionismo y el resguardo fotográfico.
Aseguró que esta colección es diferente a otras y resulta inversa, ya que está motivada por una búsqueda, por azares y reflexiones que el periodista obtuvo de lugares comunes como son los tianguis y “mercados de pulgas”, lo que la hace “riquísima”, por la relación intelectual que se establece con las imágenes.
En su oportunidad el curador de la exhibición, Alfonso Morales expuso que ésta se dividió en ejes temáticos que reúnen aquello que más interesaba a Monsiváis, que va de temas nacionales sobre la política, lo social y cultural, a lo mediático conformado por músicos, actrices y demás personalidades de la cultura popular mexicana.
Resaltó que en “Pasado Venidero” se podrá observar el diálogo entre “el Carlos coleccionista y el Carlos pensante y escritor”, donde lo más importante es resaltar el valor de la colección, no en una forma comercial sino en el contenido vivencial y narrativo que revelan los documentos.
“En realidad, la apuesta de estas obras es precisamente poner delante de nuestros ojos, documentos que permiten multiplicar las posibilidades de estudiar la fotografía desde puntos alternos”, dijo.
“Carlos no sólo coleccionó sólo por ese hecho, sino que lo hizo porque las fotografías son relatos y documentos que dan cuenta de algo; hizo una crónica no institucional, alterna de la historia de México, de aquellos eventos relegados”, agregó.
Alfonso Morales, quien conoció al intelectual mexicano, finalizó extendiendo una invitación a todo el público a “Pasado Venidero”, que muestra a la imagen como un “objeto fotográfico multidimensional” hablando de su significado.