Como cada año se llevó a cabo la XXXVII edición de la Marcha por el Orgullo LGBTTTI en la CDMX que dejó de ser rosa por un momento y se volvió multicolor por todas las personas que asistieron a dicha movilización; desde muy temprano miles de personas se congregaron en las cercanías del Ángel de la Indepedencia y caminaron por el paseo de la reforma como si se tratara de un carnaval donde personas de la comunidad LGBTTTI incluidos heterosexules desfilaron por la avenida más importante del país.
Esta marcha fue muy especial pues se recordó a los mártires de un bar en Xalapa, Veracruz y Orlando, Estados Unidos quienes murieron víctimas de actos xenofobos. También para imponer su postura respecto a los matrimonios igualitarios para personas del mismo sexo, propuesta que fue promovida por el Presidente de la República y que fue censurada por la grupos religiosos así como grupos conservadores y Pro-Vida.
Por otro lado sorprendió la participación de la actual embajadora de los EUA, Roberta Jacobson, quien ayudó a cargar una manta con el mensaje “La embajada de EU apoya la diversidad y la inclusión”; La señora Jacobson marchó al frente de diplomáticos estadounidenses y de otros países que se solidarizaron con la marcha.