El viaje de Mayes Rubeo a través de sus vestuarios para cine

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Mayes Rubeo ya estuvo en Marte, en la civilización Maya; huyó de una invasión zombi y ahora protege la Gran Muralla China.

Esta vestuarista mexicana de 55 años emprende los viajes a estas maravillosas historias desde su taller, desde donde diseñó el vestuario de taquilleras películas de Hollywood como "Avatar" y "Guerra Mundial Z".

Y ahora confeccionó 1.500 trajes para vestir a la Orden de los Sin Nombre, responsables de defender la gigantesca barrera que protege al imperio chino en pleno medioevo.

"La Gran Muralla", protagonizada por Matt Damon, Tian Jing y el chileno Pedro Pascal, se estrena la semana que viene en Estados Unidos y América Latina.

Y en esta historia de aventura fantasiosa, Rubeo creó las llamativas armaduras rojas, azules, doradas con largas capas y adornos en formas de animales que llevan estos soldados entrenados para defender la muralla de criaturas monstruosas.

"Investigamos por dos meses con la guía del maestro Zhang Yimou", el director de la cinta. "Es una persona que estuvo involucrada en cada sentido de la película, hizo unas guías y nosotros las seguimos", explicó.

"Como una no va a estar inspirada cuando tienes la oportunidad de trabajar con un cineasta de esa talla y ese talento, mi misión era no desperdiciar la oportunidad y absorber todo lo que pudiera aprender", añadió la diseñadora, residenciada en Italia, siempre risueña.

Dos mercenarios europeos -Damon y Pascal- están búsqueda de pólvora, el poderoso "polvo negro" jamás visto, cuando llegan a la muralla y se involucran en esta batalla.

Los colores de Rubeo se mezclan de forma armoniosa en la pantalla con inmensos ejércitos cromáticos marchando a lo largo de la muralla.

"Esa fue nuestra licencia, aunque los regimientos chinos de aquella época eran muy coloridos, tal vez no tan coloridos como los nuestros, pero bastante, sí", indicó.

Por ejemplo, precisó, los uniformes de la armada imperial, "los dorados que vemos en el palacio, sí son muy fieles a lo que eran".

- Capa de seda -

Rubeo montó un taller, más bien una fábrica, en Pekín con 150 personas.

Cada día se hacían entre 15 y 20 diseños, para llegar a unos 1.000 que le encantaría ver publicados en un libro.

Muchas veces hacían diseños para romper las barreras del idioma. Más fácil mostrar una imagen que tratar de explicar lo que se piensa a través de un intérprete.

Y estar en China fue una ventaja para Rubeo, que tuvo acceso a telas maravillosas.

Amante de las capas, encontró una seda de dos metros de ancho que permitía que "la aerodinámica no se rompiera por alguna costura en el medio".

Y se nota en cada salto, en cada giro, un armonioso movimiento voladizo.

Rubeo se define como una "control freak" -obsesiva- en el set: lo revisa todo, abre el set, va, viene, supervisa.

Y así va sumando créditos en Hollywood, donde comenzó a trabajar en 1985.

¿Por qué el cine y no la pasarela? "Yo viajo en el tiempo con mi vestuario y no veo otro medio para hacerlo que no sea cambiando de época con vestuario", explicó.

Su proyecto más desafiador fue "Guerra Mundial Z", dirigida por Marc Foster y protagonizada por Brad Pitt, "porque es contemporánea y todos en el equipo de producción se creen expertos".

"Todo el mundo sabe, todo el mundo opina y eso lo hace más difícil. No es que no me guste lo contemporáneo, pero me gusta más lo imaginativo", precisó la vestuarista que de China viajó al mundo del guerrero Thor con Ragnarok.

Así funciona la máquina del tiempo Mayes Rubeo, que se fue con Mel Gibson al declive del imperio maya en "Apocalypto", al planeta Marte con "John Carter" y espera algún día aterrizar en "el tiempo del Charleston" en la década de 1920. “Me encanta", confesó con una risa cómplice.

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