A partir del próximo viernes se expondrá en el Museo de Arte Raúl Anguiano MURA de esta ciudad, la exposición “Los Fantasmas de Gaudí”, de Gaal D. Cohen, con el
apoyo de la Coordinación General de Construcción de Comunidad y la Dirección de Cultura del ayuntamiento tapatío.
Gaal D. Cohen, doctor en medicina china, tanatólogo, antropólogo nato, artista-fotógrafo, interesado por la obra de Antoni Gaudí, imaginó en sus mocedades ver el Infierno en los balcones de La pedrera, para años más tarde, encontrar la espiritualidad que emana de la catedral de la Sagrada Familia.
Este hombre universal, belga y francés, de nacionalidad canadiense y tapatío por adopción, se acerca a la obra del genio catalán mediante 30 fotografías que conducen a descubrir el sentido de la vida y la parte trascendental de la especie humana.
Este proyecto es realizado a partir de tres secciones, fotografías cuadradas, fotografías horizontales, y fotografías verticales, formando en sí un mosaico moderno, haciendo honor al trabajo del arquitecto español Antoni Gaudí, máximo exponente del movimiento modernista catalán.
En esta búsqueda por la luz, las fotos cuadradas representan la vida física y material del artista, desde el nacimiento hasta la/su muerte. Gaudí fue atropellado por un tranvía en 1926, murió el 10 de junio, tres días después de su accidente, dos semanas antes de celebrar sus 74 años.
La serie horizontal simboliza la batalla y el sufrimiento del alma animal en su búsqueda para transformarse en el alma espiritual. Finalmente la tercera serie, todas las fotos en forma vertical, sin comienzo y sin final, representan el ascenso de la escalera por el logro de la libertad.
Respecto a los fantasmas en cada fotografía, se muestran tal y cual aparecieron.
De igual manera en palabras de Jorge Esquinca, menciona que la obra de Gaal Cohen, no resulta difícil considerarlo como un investigador de las diversas formas y de los variados rumbos que adquiere al desplegarse la aventura humana.
Luces y sombras que, al conjugarse en su trabajo, nos entregan la visión de un hombre profundamente comprometido con un proyecto de vida inseparable de su actividad creativa.
Si bien la fotografía es en buena medida su herramienta predilecta, no es ésta, por sí sola, la clave de su búsqueda.
La mirada de Gaal se detiene con minucia y mediante un depurado oficio en los seres y las cosas que atrapa con la cámara, pero no parece conformarse con ello; al contrario, su búsqueda apenas comienza ahí.
Viene luego un dilatado trabajo en el laboratorio, una suerte de arte combinatoria que lleva a cabo con una sapiencia técnica que no excluye la generosidad apreciativa. Se interesa vitalmente en las obras de sus semejantes –pintores, escultores, grafiteros- y se sumerge en ellas para revelar sus componentes esenciales.
Éstos, al entrar en juego con sus propias imágenes, nos entregan algo que está más allá del hallazgo fugaz: una obra nueva, una nueva posibilidad de contemplar y de elegir. Nada de lo humano, con sus insondables miserias y sus altas bienaventuranzas, parece escapar a la mirada siempre alerta, a la curiosidad genuina de Gaal Cohen.
Un artista en el que se reúnen, con felicidad, la pericia formal y la indispensable audacia.
Los textos de sala son realizados por María Fernanda Matos Moctezuma, la muestra contará con un programa de actividades paralelas que incluyen Cine MURA y talleres, estando en permanencia hasta noviembre de 2018.