El número de visitantes al Museo del Mamut podría duplicarse, si se logra firmar un convenio de comodato con el
Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para albergar los más de 800 huesos pertenecientes a al menos 14 mamuts de hace aproximadamente 14 mil 700 años, dos vértebras y una mandíbula de camello, así como un molar de un caballo, hallados tras nueve meses de excavaciones.
El Alcalde de Tultepec, Armando Portuguez Fuentes, señaló que todos los trabajos de excavación y la operación del museo corren a cargo del municipio, ya que se trata de un hecho sin precedentes a nivel mundial, pues por primera vez en el mundo se localizaron dos trampas para mamuts excavadas hace 15 mil años que constan de paredes verticales de 1.70 metros de profundidad y 25 metros de diámetro, aunque no descartan que existan más en el área.
Explicó que luego del hallazgo de los restos óseos del primer mamut, se firmó el comodato tras cumplir con diversas recomendaciones, como fue el pago de un seguro, brindar las condiciones climatológicas para la preservación de los restos óseos, así como contar con seguridad, entre otros requisitos.
Sin embargo, para dar cabida a los recientes hallazgos, se tiene que acondicionar el Museo del Mamut, trabajos y costos que correrán a cargo del municipio, añadió del Alcalde Armando Portuguez Fuentes.
Comentó que Tultepec forma parte de los más de 20 sitios ubicados en la Ciudad de México y su área metropolitana, principalmente, municipios del oriente y norte del Estado de México, donde se han ubicado restos de estos animales del Pleistoceno.
Por ello, Tultepec debe considerarse, ya no nada más Capital de la Pirotecnia, sino *Tierra de la Fauna del Pleistoceno”, añadió Portuguez Fuentes, quien subrayó que incluso el Instituto Nacional de Antropología e Historia cataloga este hallazgo como el más grande de este tipo en el país.
Según el INAH, en esa zona del norte de la cuenca vivieron entre 5 y 7 manadas de mamuts durante miles de años, pues crecían, se reproducían, morían y los cazaban; además convivían con otras especies como caballos, camellos y bisontes, sin embargo, los restos de esos animales son difíciles de hallar porque "son mucho más frágiles", concluyeron.