El Cascanueces, con coreografía de Nina Novak y música de Piotr I. Chaikovski, contará con la participación de 70 bailarines en escena y 70 estudiantes de la Escuela Nacional de Danza Clásica y Contemporánea (ENDCC)
y de la Academia de la Danza Mexicana (ADM), quienes estarán acompañados de la Orquesta del Teatro de Bellas Artes bajo la dirección de Iván López Reynoso, joven director guanajuatense.
“Lo que cada uno de los artistas pone todo de sí y permite que El Cascanueces sea nuevo para todos nosotros. No es sólo una obra de repertorio, sino la oportunidad de muchos bailarines de interpretar otro tipo de personajes y de que muchos niños participen en ella, y es la gran posibilidad de tener reuniones de producción para ver cómo la gente que viene a verlo se puede deslumbrar una vez más con el espectáculo”.
Así lo señaló David Bear, director ejecutivo de la Compañía Nacional de Danza del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), al hablar de los pormenores de El Cascanueces, en el cual participa dicha agrupación en su Temporada de Invierno los días miércoles 18 y jueves 19 de diciembre a las 20:00 horas; viernes 20 y sábado 21 a las 17:00 y 20:30 horas; domingo 22 a las 17:00 horas, y lunes 23 de diciembre a las 20:30 horas en el Auditorio Nacional.
Explicó que en la presente temporada estarán por primera vez, en el papel de Reina de las Nieves: Moisés Carrada, Valeria Mariaud, Alejandro Hidalgo y Marissa Jiménez; como El Cascanueces estrena Luis Ledesma, bailarín cubano integrante de la Compañía desde 2015.
En el personaje de Hada de Azúcar estrena Juan Capellán, Moisés Carrada, Valeria Mariaud y Gerardo Martínez, quienes estarán acompañados de los primeros bailarines de la agrupación. “Se ha protegido mucho que estos estrenos estén bien cuidados para que sea una gran experiencia para los bailarines”.
Señaló que los directores artísticos de la agrupación, Elisa Carrillo y Cuauhtémoc Nájera, determinaron el elenco y los papeles principales de la puesta en escena. “Ha sido un trabajo bastante interesante en relación con la manera en que la tecnología, las formas y las ideas se construyen. La participación de la maestra Elisa Carrillo y de Cuauhtémoc Nájera ha sido fundamental para el desarrollo y crecimiento de la Compañía durante este año”.
Aseguró que promover este tipo de espectáculos permite la tradición cultural y el crecimiento de las personas como seres humanos. El Cascanueces en sí mismo nos da esperanza y fe de lo que implicaría defender lo que uno cree, y un mundo mágico que tiene que ver con las ilusiones y la esperanza del día a día.
La primera bailarina, Blanca Ríos señaló que se trata de un ballet que permite a los bailarines el crecimiento artístico e interpretar distintos personajes. “Cada personaje tiene un desarrollo especial. He trabajado el Hada de Azúcar, Colombina o ratones y eso es lo que me ha hecho crecer y llegar hasta donde estoy, y tener la experiencia y madurez en el escenario.
“Como primera bailarina trato de hacer lo mejor que puedo y dar vida al Hada de Azúcar es una energía y adrenalina impresionante, quiero llegar al corazón y tocar las fibras de cada uno de los asistentes y crear en los estudiantes que están con nosotros un puente de inspiración”.
En tanto, Argenis Montalvo, primer bailarín, dijo que participar al lado de la ENDCC y ADM es emocionante. “Ellos nos ven como si fuéramos de otro mundo y nosotros no hubiésemos sido niños que anheláramos bailar. En algún momento todos fuimos niños y ahora somos profesionales y primeros bailarines, y queremos mostrarles que sí se puede con dedicación y esfuerzo”.
Consideró que El Cascanueces es un ballet fundamental para el bailarín que integra en su argumento diversos personajes que son una oportunidad para su desarrollo. “La CND se encuentra en un muy buen momento, estamos bien técnica e interpretativamente, hemos bailado mucho este año y El Cascanueces es un espectáculo de calidad”.