Las rutinas antes de dormir son recomendadas en todas las edades y si comenzamos a introducirlas desde que los niños son pequeños es mejor, así los acostumbramos a ciertas actividades y las realizan como parte de su vida cotidiana.
Liliana Amaro Coach de Sueño y Fundadora de Zzleep My Baby, recomienda la lectura como parte de nuestra rutina nocturna, enlistando algunos de los beneficios que esto tiene para el cuerpo humano son:
1. Nos hace dejar la tecnología a un lado.
2. Ayuda a la concentración y memoria
3. Incrementa el conocimiento y cultura
4. Reduce el estrés
5. Nos ayuda a dormir mejor y a tener un descanso más reparador.
El leer nos desconecta de todo lo que involucra movimiento y esfuerzo físico. Es una de las recomendaciones para promover el sueño, debido a que por la noche el leer es una especie de ejercicio de relajamiento que puede sostenerse hasta que ya los ojos comienzan a cansarse y la concentración se desvanece poco a poco entrando a un periodo de trance, nos podemos llegar a quedar dormidos súbitamente o decidir cuándo parar.
Leer o contar un cuento siempre se recomienda como parte de la rutina infantil ya que sirve a los niños como una indicación de que lo siguiente es cerrar los ojos y dormir. Un adulto lo puede hacer en la cama y lo recomendable es establecer una hora en la que se deben de cerrar los ojos y dormir, esto quiere decir que si se tiene problemas para dormir el libro deberá dejarse a la hora establecida como límite, o después de cierto número de páginas. Es probable que muchas personas puedan seguir leyendo por horas y esto no es malo, simplemente tenemos que ser conscientes de que dormir es importante y necesario.
Si ya tienes como practica la lectura y aun así no consigues dormir, Liliana aconseja dejar el libro a un lado, apagar la luz (obscuridad total) respirar profundamente 10 veces, pensar en cada parte de nuestro cuerpo y comenzar a imaginar cada página del libro que leímos antes de dormir, es probable que en algún momento te quedes dormido y si no es así sigue imaginando hasta que puedas conciliar el sueño.
Leer es una de las formas más sanas y relajantes de conseguir dormir y descansar profundamente.