CDMX. México, 11 de noviembre 2024 ::: Por sus contribuciones a las ciencias médicas y de la salud en México,
Omar Yaxmehen Bello Chavolla, egresado y docente de la Facultad de Medicina, fue galardonado con el Premio de Investigación 2024 de la Academia Mexicana de Ciencias, uno de los reconocimientos más prestigiosos para jóvenes científicos en el país.
Desde el bachillerato, Bello Chavolla mostró curiosidad por comprender los factores metabólicos que influyen en la predisposición a la diabetes y la obesidad, y cómo estas enfermedades pueden ocasionar un envejecimiento prematuro de órganos y tejidos. Junto a su equipo de trabajo, Bello Chavolla ha investigado esta incógnita en los últimos años, con resultados que no han pasado desapercibidos.
“Es una grata sorpresa recibir este reconocimiento, sobre todo tomando en cuenta que a veces los jóvenes no somos tan visibles. Esto confirma el gran trabajo que he hecho junto a mi equipo y demuestra que vamos por buen camino. Muchas veces lanzas lo que descubres y casi no hay retroalimentación sobre si realmente contribuye a la ciencia, pero recibir un premio como este incentiva a seguir trabajando más y mejor”, comentó.
Desde sus inicios, Bello Chavolla ha buscado que sus investigaciones aporten al entendimiento de estos padecimientos, con el objetivo de brindar mayores herramientas a sus colegas para su tratamiento. Para él, como para otros investigadores, el metabolismo desempeña un rol crucial en el desarrollo de estas afecciones, por lo que comprenderlo es vital.
A pesar de este logro, no considera que haya alcanzado su máximo potencial; al contrario, planea seguir investigando para contribuir en la lucha contra estas enfermedades.
“Éste es un pequeño escalón de lo mucho que quiero y tengo por hacer. Ahora, junto a mi equipo, debemos trabajar más en nuestras ideas, explorarlas a fondo sin descartarlas por simples que parezcan. Nuestros proyectos eran ambiciosos, pero ahora tenemos más energía para buscar respuestas a las interrogantes más complejas sobre la diabetes y la obesidad”, compartió.
Actualmente, Bello Chavolla está desarrollando metodologías para estudiar el envejecimiento biológico en la población mexicana y cómo influyen en él los factores genéticos, ambientales y sociodemográficos. Según él, al ser el envejecimiento un proceso inherente a la vida, es necesario comprender los factores que lo determinan para transitar esta etapa de forma saludable o identificar los motivos que la hacen dolorosa.
“En los países latinoamericanos hay poco conocimiento sobre las trayectorias de envejecimiento. Cada población tiene la suya, y en este momento buscamos comprender la de México. Para llegar a conclusiones estamos estudiando los determinantes sociodemográficos y genéticos”.
Recopilar y entender esta información ayudaría en diversas situaciones, como reducir el impacto del envejecimiento mediante intervenciones farmacológicas o cambios en el estilo de vida antes de que los pacientes entren en esta etapa.
A la par, Bello Chavolla también estudia la heterogeneidad de la diabetes en la población mexicana, con el fin de entender por qué afecta tanto a las personas en el país y por qué es tan difícil de manejar, tanto desde la salud pública como en la atención individual.
Bello Chavolla formó parte de la segunda generación del Plan de Estudios Combinados en Medicina. Este programa permite a estudiantes con una trayectoria académica sobresaliente y vocación investigadora cursar de manera combinada el doctorado en Medicina y la carrera en Médico-cirujano, obteniendo ambos títulos al concluir la licenciatura e iniciando así más temprano su carrera científica.
::: Un guía para el futuro
El amor de Omar Bello por la medicina se refleja no sólo en su investigación sobre enfermedades metabólicas, sino también en la formación de futuros investigadores interesados en estos temas.
Como docente, más allá del conocimiento que comparte, trata de apoyar a los jóvenes entusiastas en la investigación; incluso, algunos de ellos se han sumado a su equipo de trabajo.
“He visto llegar a alumnos con ideas muy innovadoras, y es necesario orientarlos metodológicamente desde el punto de vista científico. Muchas veces los jóvenes no tienen un respaldo que los guíe y descartan hacer investigación. Estoy comprometido a cobijarlos como lo hicieron conmigo. Las ideas de los jóvenes no deben descartarse, sino afianzarse. Como les digo: ‘ser investigador no se trata de saber todo, sino de explicar lo que aún desconocemos’”, detalló.
Aunque el Premio de la Academia Mexicana de Ciencias ha tenido un gran impacto para él y su equipo, Bello espera que inspire a más jóvenes a realizar trabajos de investigación. “Los jóvenes hacemos buena ciencia. Entiendo que la experiencia es necesaria, pero la visión fresca que aportamos también lo es”.