El pintor español Domingo Zapata decidió hacer su buena obra del día, ya que el jueves pasado The New York Post dio a conocer que luego de vender varias de sus obras al dueño de un restaurante, decidió que el dinero no le fuera entregado, sino repartido como “pizzas” para Bowery Mission", una asociación que ayuda desde 1879 a neoyorquinos en condición de calle.
El artista de 39 años decidió que el pago de 100 mil dólares no fuera en efectivo con la intención de ayudar a los necesitados de la gran manzana, por lo que pidió a Sasha Berg, propietario del establecimiento Garlic Pizza, de Manhattan que el equivalente fuera preparado en pizza y ser repartido entre las familias de bajos recursos.