El Cerrito. Santuario prehispánico de Querétaro

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Compilación de sitios arqueológicos en la entidad

Los trabajos de investigación, conservación y análisis de materiales del sitio arqueológico El Cerrito, realizados de 2005 a la fecha por Daniel Valencia Cruz y Alicia Bocanegra Islas, han sido compilados en un

volumen que será presentado esta noche en el Museo Regional de Querétaro.
Se trata del libro “El Cerrito. Santuario prehispánico de Querétaro”, que da cuenta de las principales estructuras del centro ceremonial, como la pirámide principal, la cual descansa sobre una plataforma de nivelación de 113 metros por lado, así como por la llamada Plaza de las Esculturas.
Asimismo, en el volumen se analizan los hallazgos de ofrendas en unidades residenciales, los distintos tipos de cerámica encontrada (teotihuacana, tolteca, otomí), además de objetos de piedra, principalmente puntas de proyectil hechas con obsidiana y sílex, abundó Valencia Cruz, de acuerdo con declaraciones difundidas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
El arqueólogo responsable de la zona señaló que después de realizar excavaciones y trabajos de consolidación de las principales estructuras, se procedió al análisis de los materiales recuperados.
Lo anterior, dijo, ayudó a comprender que la función de la producción escultórica “fue dar a conocer, educar y reproducir el nuevo concepto del mundo, impuesto por los toltecas en los pueblos del Valle de Querétaro”.
Añadió que este análisis ha permitido identificar deidades como Itzpapálotl, diosa norteña-chichimeca de la tierra y diosa madre; Tláloc, Huehuetéotl y Tezcatlipoca, y esencialmente los atributos del omnipresente Quetzalcóatl, plasmados en gran cantidad de elementos escultóricos.
“Hacemos particular énfasis en el análisis de la escultura en piedra, de sus diversas técnicas, así como su funcionalidad dentro del espacio sagrado; la iconografía del sitio constituye el mejor ejemplo de los avanzados conocimientos en escritura, matemáticas, calendario y astronomía que tuvieron los antiguos habitantes de lo que hoy es Querétaro”, expresó el arqueólogo.
A propósito de la presentación, en el vestíbulo del recinto se exhibirán, por primera vez, tres lápidas encontradas en la zona arqueológica en 2006, que datan de 900 a 1000 d.C., y que contienen los glifos dos ollin, ocho rehilete y 10 cuautli, cuyos símbolos representan los días “movimiento”, “fiesta” y “sol”, respectivamente.
Ubicado en el municipio de Corregidora, el centro ceremonial El Cerrito fue el más importante asentamiento prehispánico durante el apogeo de la cultura tolteca, en el Valle de Querétaro, en el periodo Posclásico Temprano (900-1200 d.C.).
También fue ocupado por los chichimecas y otomíes en el Posclásico Tardío (1200-1521 d.C.), y después de la Conquista española siguió siendo utilizado por estas etnias.

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