Una investigación realizada por un doctor en Ciencias de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), confirmó el constante uso de la medicina tradicional a base de plantas para curar enfermedades en la ciudad de México.
Arturo Argueta Villamar, adscrito al Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias de la UNAM, con sede en Cuernavaca, Morelos, dijo en una entrevista con la Agencia Informativa del Conacyt estar sorprendido por el interés de la gente en la medicina tradicional y herbolaria en la capital del país.
"Encontramos que hay una cantidad enorme de médicos tradicionales en esta ciudad, en parte migrantes, que han venido de diferentes regiones del país, y también que la medicina tradicional del Valle de México se encuentra vigente”, indicó.
La investigación de dos años quedó documentada en el libro “Plantas medicinales de uso tradicional en la ciudad de México”, que se presentó este año, un trabajo en conjunto con Carlos Zolla Luque, donde se detalla el trabajo de campo en zonas rurales y urbanas de la ciudad.
“Se documentó la presencia de la medicina alternativa en las delegaciones Xochimilco, Tláhuac, Milpa Alta, Magdalena Contreras, Tlalpan, también en zonas como el Ajusco y el sur de la ciudad; además se encuentra en los 320 mercados fijos, así como en los tianguis. En ellos siempre hay uno o hasta cinco puestos”, comentó.
El doctor en ciencias agregó que el estudio de la medicina tradicional mexicana en la capital del país era un tema pendiente, pues se tiene la creencia de que la sociedad capitalina por tener una cobertura amplia de servicios oficiales de salud, la medicina tradicional tendría escasa presencia.
El libro muestra con su nombre científico que las plantas con más uso son de fuerte linaje mesoamericano prehispánico como el árnica, los cabellitos de elote, el cempasúchil, el cuachalalate, el epazote, la escobilla, el estafiate, la flor de manita, todas estas de uso ancestral en México.
Arturo destacó el considerable número de habitantes de la ciudad que recurren a este tipo de medicina, la cual gana adeptos en las personas que hace una, dos o tres generaciones no la usaban.
"Lo notable que hemos observado es que una buena cantidad de la población mestiza, urbana, de colonias como la Del Valle, San Ángel, Mixcoac, están acudiendo cada vez más a la medicina tradicional”, expresó.
Para el investigador el uso de la medicina tradicional debe ser legalizada y reconocida, para sentar las bases que establezcan sistemas de salud mixtos, donde el paciente decida de acuerdo a sus intereses qué método utilizar.
"La sociedad mexicana tiene una gran riqueza cultural y un gran conocimiento sobre sus recursos herbolarios, por ello deseamos dar pasos firmes hacia la legalización completa de la medicina tradicional, prevista en el artículo 2 de la Constitución mexicana, en la Ley Federal de Salud, y en muchas constituciones estatales de este país, en algunas ya está reconocida y legalizada", manifestó.