El estrés es un detonante de los llamados tic nerviosos, indicó el neurólogo adscrito al Hospital de Especialidades del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Francisco Frías Márquez.
Explicó que los tics son movimientos repetitivos breves, que generalmente son precedidos por estados de ansiedad en el que la persona siente un gran deseo por realizar una maniobra, decir palabras o emitir sonidos en este contexto
“Que son actos motores breves intermitentes, puede ser involuntario o controlados. Desde un parpadeo, movimiento de la mano, encoger el hombro, estos son los más simples”, precisó.
Agregó que de hecho la persona básicamente no puede evitar la repetición del tic, por un lapso mayor a 30 minutos ya que vuelve a sentirse presa de la necesidad de hacer una y otra vez los movimientos.
El especialista del Seguro Social dijo que además del estrés, los tics nerviosos conllevan un importante componente genético para su desarrollo.
“Hay componente hereditario y genético, no sabemos a ciencia cierta cuál es el modo de herencia, a veces es también porque el papá lo hace o la mamá, hay que estar atentos si influye o perjudica al paciente, si en la escuela le afecta, o molesta en sus actividades, incluso en lo social o laboral”, apuntó Frías Márquez.
Mencionó que la “gama” de tics nerviosos abarca también la llamada ecolalia, que se refiere a la repetición de la última palabra que es escuchada por el paciente, así como del llamado Síndrome de Tourett, que define a las personas que de manera repetitiva emiten palabras altisonantes.
Advirtió que comúnmente los tics no son diagnosticados e incluso llegan a considerarse “normales”, sin embargo, no es raro que prevalezcan en la edad adulta, aunque el paciente refiera que inició con las manifestaciones en la niñez o adolescencia.
Precisó que en edades escolares los tics pueden estar presentes en hasta un tres por ciento de la población infantil en esta etapa, e incluso con frecuencia son observados en pacientes con el llamado déficit de atención.
El manejo de los tics nerviosos conlleva una terapia cognitivo- conductual a través de los especialistas en psicología, técnicas para el manejo del estrés y se puede suministrar fármacos que coadyuven en la reducción de estados de ansiedad, afirmó.