Investigadores de la Universidad del Papaloapan, campus Tuxtepec, Oaxaca, investigan algunas sustancias del forraje de amaranto que podrían utilizarse para el tratamiento de hipertensión arterial e insuficiencia cardiaca.
Dichas sustancias, conocidas como péptidos bioactivos, son secuencias de aminoácidos que tienen actividad biológica comprobada, los cuales resultan benéficos a nivel fisiológico, porque además tienen propiedades antioxidantes, explicó la doctora María de Jesús García Gómez.
A través del proyecto, la especialista explicó que se pretende dar valor agregado a los residuos generados por la cosecha de amaranto, a través del uso de las proteínas presentes en ese desecho agroindustrial.
En entrevista con la Agencia Informativa Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), detalló que han estudiado algunas de las actividades de estos péptidos, como la inhibición de la enzima convertidora de angiotensina, esta última relacionada con el tratamiento de los padecimientos citados.
Para el desarrollo del proyecto, tras la cosecha de amaranto, los investigadores dejan secar el forraje para luego molerlo y obtener harina, que es de donde extraen las proteínas.
“Posteriormente, se recurre a un proceso de hidrólisis enzimática, en donde las proteínas se mezclan con enzimas proteolíticas específicas para la ruptura de los enlaces peptídicos para obtener un hidrolizado, que a continuación se fracciona en diferentes pesos moleculares”, comentó.
De acuerdo con la investigadora se planea presentar un estudio de factibilidad a productores de la región, a fin de que usen la información para brindar más valor agregado a su producto, que podría ser adicionado en alimentos.