Detox y sin gluten son términos frecuentes al hablar de alimentación y dietas. Ya sea en Facebook, Twitter o Instagram, las dietas detox y gluten-free se han vuelto una recomendación habitual para, supuestamente, desintoxicar el organismo, aliviar síntomas gastrointestinales y mejorar la salud.
Sin embargo, no existe evidencia científica que demuestre los beneficios de las dietas detox. Al contrario, los especialistas consideran que una dieta que restringe el consumo de alimentos variados puede acarrear problemas de salud a largo plazo, como desnutrición, alteraciones metabólicas e incluso daños hepáticos.
Lo mismo ocurre con las dietas gluten free. De acuerdo con los especialistas, no se ha demostrado científicamente que una dieta libre o baja en gluten mejore síntomas gastrointestinales en la población en general, sino únicamente entre quienes padecen enfermedad celiaca.
No obstante, esta enfermedad es poco frecuente entre los mexicanos.
Menos del 1% de nuestra población presenta intolerancia a esta proteína presente en el trigo, el centeno y la cebada, en contraste con algunas poblaciones europeas en las que la prevalencia es mayor.
Si los modelos de alimentación que nos llegan desde otros países, por ejemplo, Estados Unidos y Europa, aplican para esas poblaciones, no sería aventurado pensar que esas recomendaciones no sean del todo adecuadas para nosotros, ya que nuestra información genética difiere.
De ahí que los especialistas recomienden asistir con un profesional de la nutrición si se presentan malestares gastrointestinales al consumir ciertos alimentos, ya que podrían ser ocasionados por un exceso de bacterias en el sistema digestivo, intolerancia a la lactosa o algún otro tipo de problema como intestino irritable.