Shi Zhengli, mejor conocida como “la mujer muerciélago”, es una viróloga reconocida por su trabajo sobre el coronavirus en murciélagos, además es subdirectora del Instituto de
Virología de Wuhan, y ha advertido que los virus que se están descubriendo ahora sólo son la punta del iceberg.
La especialista mencionó en una entrevista para el canal de noticias CGTN que, de acuerdo con sus investigaciones, ha identificado docenas de virus mortales similares al SARS en cuevas de murciélagos, y advierte que hay más por ahí.
“Si queremos evitar que los seres humanos se vean afectados por el siguiente brote de enfermedades contagiosas, debemos adelantarnos para aprender sobre estos desconocidos virus albergados en animales salvajes en la naturaleza y dar alertas tempranas y si no los estudiamos, posiblemente habrá otro brote”, dijo.
Shi se ha dedicado al estudio de murciélagos durante al menos 16 años, y junto con sus colegas como el ecologista de enfermedades Peter Daszak, presidente de EcoHealth Alliance, han advertido durante mucho tiempo que la tasa de aparición de nuevas enfermedades infecciosas se está acelerando, especialmente en los países en desarrollo.
"Es increíblemente importante determinar la fuente de infección y la cadena de transmisión entre especies para descubrir nuevos virus en la vida silvestre", dice Daszak.
Por otra parte, la viróloga también hizo un llamado a la cooperación internacional en la lucha contra las epidemias para que los científicos y gobiernos sean transparentes y cooperativos en la investigación sobre los virus, pues habló de las acusaciones que el presidente de EUA, Donald Trump, ha hecho respecto al coronavirus, que, según sus versiones, fue creado en un laboratorio de Wuhan.
“Es muy lamentable cuando se politiza la ciencia”, resaltó.
Asimismo, explicó que las características genéticas de los virus con los que ha trabajado no coinciden con las del COVID-19 que afecta a los humanos. Incluso, mencionó en una publicación en redes sociales que la pandemia no tiene nada que ver con su laboratorio.