El COVID-19 invade el parénquima cerebral, endotelio, corazón y altera la coagulación, por lo que, tiene capacidad de producir ictus. La campaña DALE ayuda a identificar los síntomas para detectar un evento cerebral a tiempo.
Ciudad de México, 29 de octubre 2020, - El ictus es muy común en todo el mundo, pero en México, cada vez es más frecuente debido a la mala alimentación, sedentarismo, tabaquismo y enfermedades no controladas como diabetes e hipertensión, entre otros factores.
De acuerdo con el Dr. Juan Manuel Calleja Castillo, neurólogo y especialista en enfermedad vascular cerebral, ictus, significa un golpe repentino, también se le conoce como enfermedad vascular cerebral, embolia o derrame cerebral, que se manifiesta con mayor frecuencia en personas de entre 50 y 60 años, sin embargo, por el estilo de vida sedentario, cada vez hay más gente joven de 30 o 40 años que lo está padeciendo.
Asimismo, en personas que tienen factores de riesgo para aterosclerosis como: colesterol elevado, diabetes, presión alta, fumadores, con una dieta alta en grasa, que hacen poco ejercicio, son factores principales que hacen que se pueda tener un ictus.
“Por otro lado, la presencia de coronavirus representa un riesgo extra para un infarto cerebral, ya que se ha observado a pacientes que tienen COVID-19 que se manifiesta con un infarto, aunado a que, con el confinamiento, se limita la actividad física, empeora la dieta y muchas personas no pueden o quieren acudir al médico a controlar enfermedades que ya padecen como diabetes o hipertensión. Al no atenderse a tiempo, se exponen a tener consecuencias graves y que sean difíciles de tratar”, explicó el Dr. Calleja, coordinador del Programa Ictus en el Centro Médico ABC.
Por lo que es importante conocer y emitir una alerta para que la gente reconozca los signos de un ictus, que sea fácil de recordar y de forma simple a través de una nemotecnia llamada DALE, cada letra corresponde a un síntoma:
• Debilidad facial, parálisis de la mitad de la cara, se da de forma súbita, desviando la cara y boca.
• Afloja el brazo o la pierna, el paciente no puede mover las extremidades.
• Alteración del lenguaje
Entra en contacto, hay que llamar a la ambulancia e ir al hospital.
Estas son las características de ictus isquémico o infarto, pero cuando es un ictus hemorrágico o derrame, el paciente manifiesta un dolor de cabeza muy intenso de forma súbita, que indica un dato de alarma para ir al hospital.
Estas dos formas son las más frecuentes, pero afortunadamente son tratables, “si el paciente llega rápidamente al hospital, nos da la oportunidad de tratarlo, en la hora dorada, así le llamamos a la primera hora en que el paciente está mostrando los síntomas, ya que entre más pronto se trate y evalué, más posibilidades tiene de revertir una parálisis”, señalo el experto.
En el marco del Día Mundial del Ictus, 29 de octubre, el Dr. Calleja recomienda poner atención a los signos y síntomas de un ictus, controlar enfermedades como diabetes, hipertensión, dejar de fumar y hacer ejercicio, con lo cual se puede evitar este problema o alguna enfermedad cardiovascular.
Además, apunta que el Centro Médico ABC cuenta con el Centro de Ictus, que tiene un esquema de tratamiento que evalúa al paciente de forma rápida para poderlo dirigir ya sea a un tratamiento de trombosis intravenosa con medicamento por la vena o terapia endovascular con cateterismo, “lo hacemos con mucha eficiencia estamos certificados por la Joint Commission International para el programa de ictus, recientemente recibimos un premio por la Organización Mundial del Ictus por el manejo del paciente”.
“En el día mundial del ictus y siempre, hacemos labor de concientización para que la gente reconozca estos síntomas, sepa qué hacer, acuda al hospital rápidamente para que nos den la oportunidad de que el paciente pueda reintegrarse a su familia, a su trabajo, y lo más importante, que los hábitos de estilo de vida cada vez sean mejores”, concluyó el Dr. Juan Manuel Calleja Castillo, quien también es Jefe de Urgencias del Instituto Nacional de Neurología.