Finlandia, 24 de agosto 2022: El estudio abre la puerta a nuevos ensayos clínicos para ver si la vitamina D podría servir
como una opción de tratamiento alternativo contra los síntomas depresivos.
Una amplia investigación que recopiló y revisó más de 40 estudios previos reveló que la vitamina D podría tener efectos que alivian los síntomas de la depresión en adultos, según se detalla en el estudio publicado por la revista Critical Reviews in Food Science and Nutrition.
El cuerpo humano necesita una cantidad adecuada de vitamina D para funcionar correctamente, tanto física como mentalmente. Un suplemento de esta vitamina podría ayudar a controlar los niveles de calcio, fosfato y a regular funciones del sistema nervioso central. De hecho, fue muchas veces recomendada para combatir los efectos del Covid-19.
En la investigación se analizaron los datos de unas 53.235 personas con y sin depresión, todos ellos tenían diferentes condiciones físicas. Estas personas recibieron suplementos de vitamina D -50 a 100 microgramos por día- y placebos.
Los resultados sugieren "efectos beneficiosos" con la vitamina D
En aquellos participantes que tenían depresión, los científicos observaron que los suplementos de esta vitamina demostraron ser más efectivos que los placebos para aliviar los síntomas depresivos.
"Estos hallazgos fomentarán la realización de nuevos ensayos clínicos de alto nivel en pacientes con depresión para arrojar más luz sobre el posible papel de la suplementación con vitamina D en el tratamiento de la depresión", afirmó el autor del estudio Tuomas Mikola, de la Universidad de Finlandia Oriental.
"Nuestros resultados sugieren que la suplementación con vitamina D tiene efectos beneficiosos tanto en individuos con trastorno depresivo mayor como en aquellos con síntomas depresivos más leves y clínicamente significativos", escribieron los investigadores en su artículo.
En búsqueda de tratamientos alternativos
La depresión afecta a más de 280 millones de personas cada año. Los tratamientos con antidepresivos no siempre funcionan, por lo que los investigadores buscan nuevas alternativas. Y si bien este análisis que acumula 41 estudios podría servir para buscar una solución, reconocen que aún faltan más estudios por hacer para entregar una evidencia contundente.
"A pesar del amplio alcance de este meta-análisis, la certeza de la evidencia sigue siendo baja debido a la heterogeneidad de las poblaciones estudiadas y al riesgo de sesgo asociado a un gran número de estudios", concluye Mikola.