España, 23 de noviembre de 2022: El Vall d’Hebron Instituto de Investigación (VHIR) ha demostrado en modelos animales la eficacia de un fármaco para evitar el
desarrollo de metástasis en dos tumores infantiles, el neuroblastoma y el rabdomiosarcoma, y en cáncer de mama, aunque todavía es necesario determinar en qué subtipos funcionará.
Las metástasis son responsables de más del 90 % de las muertes por cáncer, pero hasta ahora existen muy pocas terapias específicas para evitar la dispersión por el organismo de las células malignas.
El estudio, publicado este miércoles en la revista “Cellular and Molecular Life Sciences”, ofrece una posible nueva estrategia terapéutica que se ha demostrado efectiva en ratones, a la espera de que próximamente se corroboren los resultados mediante un ensayo clínico con humanos.
-Inhibidor de una proteína clave en el desarrollo de la metástasis
El protagonista es el fármaco RA08, desarrollado por el VHIR y la empresa biotecnológica BCN Peptides, que actúa como inhibidor de una proteína, la integrina alfa9 (ITGA9), que es clave en el desarrollo de metástasis.
En ratones, los investigadores han observado que entre el 50 y el 70 % de los animales medicados no desarrollaban metástasis de dos de los cánceres infantiles más frecuentes: neuroblastoma, que ocurre cuando aparecen tumores en el tejido nervioso, y rabdomiosarcoma, cuando se originan en tejidos blandos, como los músculos.
En cuanto al cáncer de mama, los investigadores no han visto reducciones completas pero sí una disminución de la intensidad de la metástasis, con un 50 % de menos focos.
Los tres tumores tienen en común unas tasas de supervivencia altas, que sin embargo disminuyen mucho cuando los pacientes desarrollan metástasis.
“El fármaco está diseñado para evitar la formación de las metástasis, no para tratar las ya desarrolladas, así que sería más bien un tratamiento preventivo”, ha destacado el investigador principal del grupo de Cáncer y Enfermedades Hematológicas Infantiles del VHIR, Josep Roma.
El investigador del VHIR ha resaltado que no se ha observado ningún efecto secundario del fármaco en ratones, por lo que, de confirmarse en humanos esta baja toxicidad, podría emplearse para cualquier paciente de estos dos tipos de cáncer infantil estudiados, con el fin de prevenir la metástasis y reducir la mortalidad.
Pero sobre todo, ha puntualizado, estaría indicado para pacientes con algunos subtipos de tumores que ya se sabe de antemano que tienen una elevada probabilidad de metástasis.
En cuanto al cáncer de mama, Roma ha indicado que, a tenor de las observaciones en ratones, puede constituir una estrategia “interesante” de prevención de metástasis, aunque ha resaltado que faltan estudios para determinar en qué subtipos de tumores funcionaría.
Lo mismo con tumores de otra naturaleza: “Los resultados han salido tan bien que estamos convencidos de que se puede trasladar a otros cánceres, de niños o de adultos, pero necesitamos más tiempo para poder investigar”, ha subrayado Roma.
Esta investigación se inició gracias a las ayudas del programa La Marató de TV3 de 2009 y contó posteriormente con ayudas de ACCIÓ/FEDER (RIS3CAT) y del Instituto de Salud Carlos III.
También han colaborado la Fundación Albert Bosch, de la asociación Mi compañero de viaje, la Abidal Foundation y la asociación Tot per tu.