España, 14 de enero de 2025 ::: En los últimos días se está hablando del norovirus, un patógeno que provoca
molestias gastrointestinales y del que en España no existe un sistema de vigilancia nacional, con lo que es complicado saber si hay más o menos casos en comparación con las misma época del pasado año. Los médicos de familia afirman que no tienen datos de que, por el momento, hayan aumentado.
El portavoz del grupo de Enfermedades Infecciosas de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (semFYC), Javier Arranz, explica a EFEsalud que el norovirus no es un virus respiratorio, sino gastrointestinal, que provoca problemas como diarrea o vómitos, entre otros malestares.
“El problema es que la gastroenteritis no es una enfermedad de declaración obligatoria como la gripe. Y si no se analizan las heces de la persona no se sabe de qué virus o bacteria se trata”, señala Arranz.
::: No hay alerta
En este sentido, explica que cuando una persona acude al centro de salud con síntomas gastrointestinales, no se suele pedir el análisis de heces porque normalmente son pasajeros y en unas 48 horas se resuelven. Otra cosa es que sean personas vulnerables o niños pequeños, que no se puedan hidratar bien y tengan que ir al hospital y allí ya les hagan las pruebas.
“Para poder saber si hay un aumento de casos habría que tener una información muy clara de los laboratorios en red, y por ahora el centro creador de alertas no ha lanzado ningún mensaje”, afirma Arranz.
El médico de familia afirma que cuando hay brotes epidémicos, se hacen detecciones concretas, pero en estos momentos no hay. “A mí me cuesta decir si hay más o menos casos que otros años, otra cosa es la sensación que podamos tener”, agrega.
Si en los últimos días se está hablado más del norovirus, Arranz opina que puede ser porque hace unas semanas en Reino Unido, donde sí hacen un seguimiento importante de este patógeno al haber tenido muchos brotes en diferentes épocas, han notificado más casos.
Se puede contrastar, señala el médico, en la web de la agencia británica de Salud Pública que ya están disminuyendo los casos y los datos se acercan a la normalidad.
“Es verdad que cuando esto lo ves en un país, puede dar la sensación de que vaya a pasar también en los países de alrededor, como pasa con los virus respiratorios. Pero este tipo de virus quizás es un poco distinto, dura menos tiempo y no es un virus respiratorio que se transmite fácilmente por vía respiratoria, por lo tanto no que ocurra en Inglaterra no quiere decir que vaya a pasar lo mismo aquí”, asevera
::: Los síntomas
Los norovirus, según la Sociedad Española de Epidemiología (SEE), fueron los primeros que se visualizaron en heces por microscopía electrónica en 1972. Un año después, se detectaron los rotavirus, y a partir de entonces otros virus se han ido asociando con infecciones gastrointestinales.
Las gastroenteritis por virus provocan náuseas, vómitos, diarrea, malestar, dolor de cabeza, de cuerpo y, en ocasiones, fiebre. Por eso, señala Arranz, hay pacientes que creen que tienen gripe cuando no es así.
Se dividen en varios genogrupos (GG), según la SEE, que indica que los norovirus se han reconocido como el principal agente responsable de los brotes de diarrea no bacterianas y de las gastroenteritis de origen alimentario.
La duración de los síntomas puede variar pero suelen desaparecer a las 48 o 72 horas, sin dejar secuelas.
La mejor prevención es una buena higiene de manos -se suele transmitir sobre todo por el contacto y la preparación de alimentos- señala el portavoz de semFYC, mejor con agua y jabón que con gel hidroalcohólico.
::: No hay tratamiento
“Una de las cosas interesantes es que con el norovirus, la concentración de virus no necesita ser muy alta para poder causar enfermedad. Con poca cantidad de virus es cierto que puede provocar diarrea”, afirma Arranz, quien añade que si bien pueden darse casos durante todo el año, los brotes suelen afectar sobre todo en el periodo invernal.
En cuanto al tratamiento, el médico de semFYC subraya que no hay, pero sí es recomendable seguir unas pautas: hidratarse muy bien, tomar antitérmicos si aparece la fiebre, y llevar una dieta astringente.
E insiste de nuevo en “una buena higiene para evitar propagarlo”.