España, 20 de enero de 2025 ::: La sociopatía, tal y como la define la Real Academia de la Lengua (RAE)
es el trastorno de la personalidad caracterizado por comportamientos antisociales. Se trata de un término que engloba una serie de conductas que se distinguen, entre otros, por la incapacidad de seguir las normas sociales y la ausencia de remordimientos.
El término “sociopatía” lo acuñaron inicialmente, en el siglo XIX, psiquiatras que estudiaban a personas con comportamientos antisociales sin aparentes signos de enfermedad mental, según explica la Clínica Universidad de Navarra (CUN).
::: Trastorno de personalidad antisocial
En la actualidad, el término lo ha reemplazado otro, el de “trastorno de personalidad antisocial” (TPA), diagnóstico que está reconocido en el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5).
Describe comportamientos y actitudes que muestran falta de conciencia sobre los derechos de los demás, “incapacidad para seguir las normas sociales y una falta de remordimientos por comportamientos perjudiciales o antisociales”.
Según subraya la CUN, es un concepto “ampliamente debatido y sujeto a discusión en la psicología y la psiquiatría”, con diversos enfoques, que interpretan sus causas y manifestaciones de forma distinta.
Las personas que tienen este trastorno pueden mostrar falta de respeto por los derechos de los demás, incumplimiento de las normas sociales, impulsividad, mentiras, manipulación de los demás para el beneficio personal, así como incapacidad para sentir remordimiento o culpa y la tendencia a culpar a los demás por sus propios problemas o comportamientos.
::: ¿Qué la motiva?
La causa exacta de la sociopatía, señala la CUN, se desconoce aunque puede responder a una combinación de factores genéticos, sociales y ambientales.
De hecho, algunos estudios han demostrado que personas que tienen antecedentes familiares de trastornos de personalidad pueden tener mayor riesgo a desarrollarla.
Es más común en hombres que en mujeres, y suele debutar en la adolescencia o al inicio de la edad adulta.
::: Diagnóstico y tratamiento
Solo los psiquiatras o psicólogos clínicos son los que pueden hacer el diagnóstico, a partir de la evaluación clínica, la observación directa del comportamiento de la persona y de la realización de pruebas psicométricas.
Los pacientes con el trastorno suelen resistirse a la terapia, con lo que el tratamiento puede ser difícil. No obstante, señala la CUN, algunos enfoques terapéuticos, como la terapia cognitivo-conductual, han demostrado “cierta eficacia” en la mejora de los comportamientos y actitudes antisociales.
Y para tratar los síntomas coesxistentes, como la depresión o la ansiedad, se pueden utilizar medicamentos.
::: ¿Se puede prevenir?
La prevención del trastorno pasa por la identificación temprana de las señales de comportamiento antisocial en la infancia o adolescencia, y por la intervención.
Los programas de apoyo y educación para los padres, así como las intervenciones escolares y comunitarias, pueden ser útiles, indica la CUN.