Entre 60 y 80 por ciento de los mexicanos consumen plantas medicinales, indicó María de la Luz Miranda Beltrán, investigadora del Departamento de Ciencias de la Tierra y de la Vida del Centro Universitario de los Lagos (CULagos) de la UdeG.
Dijo que entre la comunidad médica existen prejuicios en torno a las plantas medicinales; “me atrevería a decir que entre muchos galenos no hay aceptación debido al desconocimiento, pero la realidad es que las personas consumen plantas medicinales”.
Expresó la necesidad de que haya interacción entre el médico y los investigadores, “hay plantas con actividad antitumoral, pero muchas veces no se utilizan porque el médico no lo permite”.
“Si los médicos conocieran sobre el uso de las plantas medicinales y sus aplicaciones desde un punto de vista científico, podrían elaborarse protocolos especializados para poder ayudar al paciente”.
Señaló que la regulación de las plantas medicinales debe hacerse por especialistas en la materia, “es importante demostrar, a través de estudios científicos, si tienen efecto para una determinada enfermedad e informar al médico de las bondades”.
“Debe conocerse cuáles componentes tienen las plantas y en qué dosis deben consumirse, ya que el exceso puede tener efectos negativos en la salud”.
Expresó que mientras la gente no conozca con exactitud los beneficios de las plantas medicinales, “pueden correrse riesgos, como la intoxicación”.
Resaltó que la suma de esfuerzos de la Secretaría de Salud, el gobierno, las comunidades científica y médica, es necesaria para regularizar las plantas medicinales y evitar la charlatanería.