Las fibras de asbesto -se informó-, pueden causar problemas serios de salud. Si se inhalan, pueden interferir en el funcionamiento normal de los pulmones. Tres enfermedades específicas –asbestosis, cáncer del pulmón y otro tipo de cáncer, conocido como mesotelioma-- han sido relacionadas con la exposición al asbesto.
Por lo anterior, los diputados federales Rodrigo González Barrios, Carlos Reyes Gámiz y Uriel Flores Aguayo propusieron a la Comisión Permanente exhortar al Presidente de la República para que instruya a los titulares de las Secretarías de Salud, de Medio Ambiente y Recursos Naturales, de Hacienda y Crédito Público, de Trabajo y Previsión Social, y de Economía, así como de aquellas otras dependencias del gobierno federal con competencia en el asunto, a desarrollar una estrategia de corto plazo con el objetivo de prohibir la producción, importación, distribución, comercialización y uso del asbesto en el país.
El asbesto es un carcinógeno humano. Los efectos a largo plazo sobre la salud pueden ocurrir algún tiempo después de la exposición al asbesto y pueden perdurar durante meses o años.
En México –añadieron- las investigaciones de especialistas en Salud en el Trabajo, del Instituto Mexicano del Seguro Social, demuestran una clara relación entre quienes por su trabajo tienen riesgo de exposición al asbesto y el mesotelioma maligno pleural, donde de 119 casos confirmados, el 34.7 por ciento falleció. Se estima que al año se presentan alrededor de 500 casos.