La prevención y atención de las enfermedades crónico-degenerativas debe ser una prioridad para el sector salud. En México se ubican entre las diez principales causas de muerte, por lo que ya representan un reto para la vida nacional
Diputados perredistas exigieron a la Secretaría de Salud informar sobre las acciones emprendidas para garantizar el mejor tratamiento y control de las enfermedades crónicas no transmisibles.
A través de un punto de acuerdo propuesto a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, los legisladores Silvano Aureoles Conejo, Agustín Miguel Alonso Raya, Roberto Carlos Reyes Gámiz, Aleida Alavez Ruiz, Fernando Cuéllar Reyes, Alfa Elian González Magallanes, Lizbeth Eugenia Rosas Montero y Víctor Manuel Bautista López, apuntaron que la prevención y atención de las enfermedades crónico degenerativas debe ser una prioridad para el sector salud.
Argumentaron que el crecimiento y letalidad de este tipo de males justifican darle atención prioritaria.
Agregaron que el efecto social de estas anomalías será creciente, ya que afectan a individuos en edades productivas.
Consideraron que para la atención de estas enfermedades se debe contar con un sistema que garantice la equidad, cohesión social e igualdad de oportunidades, así como garantizar medicamentos de calidad, eficaces y seguros.
Señalaron que las enfermedades crónicas degenerativas transmisibles y no transmisibles son uno de los mayores retos que enfrenta el sistema nacional de salud, y que desde hoy constituyen uno de los problemas de salud pública de mayor magnitud y trascendencia para la población con daños y riesgos que se incrementan cada vez más, afectando de este modo a las familias, a las instituciones y a toda la sociedad.
Advirtieron que, según diversas estimaciones, las enfermedades crónico-degenerativas transmisibles y no transmisibles representan 60 por ciento de las muertes a nivel mundial y 80 por ciento en países de ingresos medios y bajos, esperándose un incremento de aproximadamente 17 por ciento en la siguiente década.
Aunado a lo anterior, se debe destacar el impacto sobre las familias y la sociedad en general, no sólo por las repercusiones a la salud, sino por el impacto económico.
Añaden que no es un tema menor puesto que en México, las enfermedades crónico degenerativas transmisibles y no transmisibles se inscriben dentro de las 10 principales causas de muerte.
Esto representa un reto para la vida nacional, que registra un incremento cada vez mayor de daños y riesgos, por lo que se requiere necesariamente de la participación solidaria y la suma de esfuerzos de todos los sectores y de las instituciones del sector salud, incluyendo la movilización social.