La encargada de la División de Medicina Familiar de la Coordinación de Áreas Médicas, Luisa Estela Gil Velázquez, señaló que a través del programa de DiabetIMSS se proporciona atención multidisciplinaria a quienes ya la padecen.
Destacó que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) busca la prevención en la incidencia de enfermos con diabetes y
las consecuencias de la diabetes mellitus, enfermedad crónica degenerativa.
Así también destacó que en el Programa se brinda un cuidado integral a pacientes con diagnóstico de diabetes con la participación del equipo de salud integrado por el médico familiar, enfermera general, estomatólogo, trabajadora social, nutricionista, dietista, y psicólogo.
Recordó que este programa tiene un enfoque de atención a las necesidades y valores de cada persona, para que además de consulta médica y manejo farmacológico, reciban sesiones educativas que incidan positivamente en sus estilos de vida.
El Seguro Social tiene dos modalidades de cuidado y vigilancia, el primero de estos a través de 136 módulos DiabetIMSS, a los que acuden 103 mil pacientes de los cuales el 48 por ciento mantiene controlados sus niveles de glucosa, colesterol, triglicéridos y presión arterial.
Mientras que aquellos pacientes que no asistan a dichos módulos pueden referirse a los consultorios de las Unidades de Medicina Familiar, donde se aplica la Guía Práctica Clínica en lo que comprende exploración física, solicitud de estudios de laboratorio, tratamiento farmacológico y no farmacológico, así como seguimiento y referencia a grupos educativos y de autoayuda.
Gil Velázquez precisó que quienes sufren diabetes se les orienta sobre nutrición saludable, el consumo adecuado de algunos tipos de alimentos (proteínas, carbohidratos, grasas), aprender a comer por porciones, no hacer ayunos prolongados, incluir refrigerios o colaciones de frutas o verduras, con base en las necesidades de cada persona y a los padecimientos asociados como obesidad.
La especialista recomendó hacer deporte. Iniciar con una rutina de cinco minutos; pasar a 10, luego 15 hasta llegar a 30. Si se trata de caminata o ejercicio aeróbico aumentar la velocidad para reducir la obesidad y disminuir el riesgo de presentar diabetes, hipertensión o cualquier otra de las enfermedades asociadas.