Hay 80 mil muertes al año sólo de diabetes en el país; de cada cuatro camas de hospital tres están ocupadas por pacientes cuyos padecimientos son resultado del sobrepeso y obesidad, mientras que de cada 10 personas siete están muy por arriba de su peso normal.
Diversas organizaciones han impulsado la iniciativa del impuesto a bebidas azucaradas y desde diciembre del 2011 que esta fue presentada, tiene por objetivo inhibir el consumo de las bebidas azucaradas con un respaldo de 50 legisladores entre diputados y senadores, aseguró la panista Marcela Torres Peimbert, quién presentó dicho aumento a estas bebidas.
En este sentido, la legisladora afirmó que es momento de trabajar en temas de salud siendo que este sistema está en riesgo debido a los padecimientos derivados de la obesidad, y no ceder ante las presiones de los empresarios; por lo que propone no un peso sino de dos pesos por cada litro de bebida azucarada; impuestos recomendados por organizaciones como la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por organismos nacionales como la Academia Nacional de Medicina y el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
Anabel Velasco Bernal del INSP, aseguró que este impuesto debe de venir acompañado por otras acciones como la garantía al acceso de agua potable, alimentos saludables, regulación en el etiquetado y comunicación educativa.
En estimaciones del INSP señalan que “si el impuesto del refresco aumenta en 10 por ciento el consumo podría reducirse entre 10 y el 13 por ciento”, sin embargo duplicando el impuesto, esta reducción se vería entre un 20 y 26 por ciento.
En México el consumo por persona es de 163 litros por persona aproximadamente, de llevarse a cabo sólo un peso de impuesto por litro, la reducción de ingesta se vería a 140 y 146 litros; en caso de duplicarse, el consumo estaría entre 120 y 130 litros por persona, donde los resultados a través de un modelo matemático tomando en cuenta los datos de la Encuesta Nacional de Salud del 2012. Con el impuesto del 10 por ciento, se reduciría en uno por ciento el peso con un ahorro monetario de seis mil 600 millones de pesos, mientras que del doble sería de un dos por ciento y económicamente representa 13 mil millones de pesos.
Los resultados de la propuesta del presidente darían 400 mil y 630 mil casos menos de diabetes con un ahorro de gasto al 2030 de 3.2 a 25.2 mil millones de pesos; mientras que con un impuesto al doble, los casos reducidos por diabetes devendrían en 800 mil a poco más de un millón 200 mil con un costo ahorrado de 6.4 a 50.9 mil millones de pesos.
Esto generaría una recaudación de 15 mil millones de pesos de acuerdo a la propuesta del mandatario federal, mientras que por medio de la propuesta del 20 por ciento la recaudación incrementa a 24 mil millones de pesos.