“Me han crecido los pies, el pelo, y pronto usaré ropa como la de mamá”. Así empieza El brasier de mamá: el primer libro sobre cáncer de mama dirigido a niñas entre nueve y once años.
Con un lenguaje sencillo, inteligente y sensible, la autora Edmée Pardo cuenta la historia, en primera persona, de una pequeña que empieza a descubrir cambios en su cuerpo y en el de su madre. A la niña le empiezan a crecer los pechos por la misma época en la que su madre asiste a una revisión después de haber sentido una extraña “bolita” en un seno. De repente, el tendedero está vacío, ya no cuelgan los coloridos brasieres de su madre que le gustaba ver a través de la ventana.
Tras escuchar la explicación de su madre sobre la enfermedad que está iniciando, la niña no quiere seguir creciendo. “Es inevitable crecer” le dice la madre “lo que debes hacer es aprender a cuidarte”.
El contenido está sustentado en investigaciones, asesorías de especialistas y testimonios, por lo que fácilmente puede convertirse en referencia para personal médico y docente.
Empezar a usar brasier no es solo resultado del desarrollo físico, también conlleva responsabilidades sobre el propio cuerpo. La autoexploración para la detección temprana de cáncer de seno es el tema central de El brasier de mamá, un libro con el que la Fundación Alma IAP, Bank of America Merrill Lynch y Trilce Ediciones pretenden romper los tabúes en las mujeres sobre tocarse a sí mismas, cuando ello puede llegar a salvar vidas.
Las ilustraciones de Edgar Clement, llenas de color y sutileza, hablan por sí solas. Además de dar vida a esta madre con su hija, también instruyen sobre el cuerpo femenino y las posiciones claves para la autoexploración.
Las últimas páginas del libro las compone un glosario. Palabras como mastografía, metástasis y quimioterapia son explicadas de una manera natural y sencilla.
El brasier de mamá se presentó en la FIL de Guadalajara, con la presencia de la autora Edmée Pardo, la doctora y Directora la Fundación Alma IAP, Rina Gitler, y de Marcella Lembert, Vicepresidenta en Responsabilidad Social Corporativa del Bank of America Merrill Lynch.
RECUADRO
· A nivel mundial, el cáncer de mama es la segunda causa de muerte en mujeres de 30 a 59 años de edad; cada año se diagnostican 1.6 millones de casos nuevos y cobra la vida de más de 400 mil personas. Según el Reporte Mundial sobre Cáncer de la International Agency for Research on Cancer (IARC), seis de cada diez muertes por este tipo de cáncer ocurren en países en vías de desarrollo como México.
· El cáncer de mama es curable en 98% de los casos, siempre y cuando sea diagnosticado a tiempo.
· La autoexploración debe iniciarse desde la pubertad.
· El primer paso es observar los senos en el espejo, ver su forma, color y posibles cambios en la piel y, el segundo, es tocar las mamas en posición recostada y después sentada prestando atención a cualquier anomalía o “bolitas” sospechosas.