De acuerdo con investigaciones realizadas por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el 50 por ciento de los casos de personas con bulimia o anorexia tiene cura; y del otro porcentaje restante, un 20 por ciento sobrevive con recaídas; otro 20 por ciento mejora y sólo un 10 por ciento muere.
La Secretaría de Salud local no cuenta con un programa específico para el tratamiento de bulimia y anorexia, además de no existir un servicio especializado a nivel hospitalario, remitiéndose a los pacientes a los Institutos Nacionales correspondientes, con tratamientos a base de psicoterapia y farmacoterapia.
La coordinadora del Partido del Trabajo (PT) en la Asamblea Legislativa, Miriam Saldaña, urgió a las autoridades de Salud, Educación y Desarrollo Social del Gobierno capitalino emprender un programa para la prevención y atención de la anorexia y bulimia, ya que en el Distrito Federal se registraron el último año 20 mil casos, de los cuales 95 por ciento fueron en mujeres.
Aclaró sin embargo, que la recuperación que tenga cada enfermo de anorexia y bulimia, depende de que la enfermedad se detecte a tiempo y que reciban un tratamiento multidisciplinario. “Si los trastornos son detectados en el primero o segundo año, es posible atenderlos con éxito, siempre y cuando estén dispuestos a recibir ayuda”, agregó.
Citó datos difundidos por la Secretaría de Salud del DF, que registran cada año 20 mil casos de anorexia y bulimia, siendo la edad promedio de inicio de estos padecimientos, los 17 años, aunque algunas cifras revelan edades de entre los 14 y 18 años; convirtiéndose estos trastornos alimenticios en la tercera enfermedad más frecuente entre los adolescentes, después del asma y la obesidad.
“Es momento de llevar acciones contundentes, con el fin de salvaguardar la salud física y psicoemocional de nuestros adolescentes”, señaló Saldaña Cháirez, luego de mencionar que a nivel nacional, de cada 100 mujeres, diez padecen anorexia y cinco de ellas mueren, mientras el resto sufre las consecuencias de la enfermedad durante toda su vida.
Ante esa situación, la asambleísta del PT hizo un llamado a los titulares de Salud, Armando Ahued; de Educación, Mara Robles, y de Desarrollo Social, Rosa Icela Rodriguez, implementar, de manera conjunta, un programa para la prevención y atención de la anorexia y la bulimia, a efecto de sensibilizar a la población en general, en especial los jóvenes, sobre dicha problemática alimenticia.
Estos trastornos son muy difíciles de medir, porque quienes los padecen niegan rotundamente su existencia, a pesar de que es imposible ocultar los síntomas como la excesiva pérdida de peso, provocando, en algunos casos, alteraciones cardiovasculares que a mediano o largo plazo derivan en paro cardiaco e, incluso, caída de piezas dentales y daños en el aparato digestivo.