Personas sedentarias, con obesidad, altos niveles de colesterol y padres diabéticos están en riesgo de desarrollar prediabetes, condición que además incrementa la probabilidad de presentar la enfermedad como tal, en el corto plazo.
La médica general adscrita a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 3 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Claudia Gabriela González de la Torre, señaló que el exceso de peso y los niveles altos de triglicéridos suponen en estos casos hasta 50 por ciento de riesgo de ser prediabético.
“Si se tiene además un antecedente familiar de la enfermedad, las posibilidades de tener el padecimiento aumentan hasta 70 por ciento”, afirmó y explicó que la prediabetes se diagnostica cuando una persona registra niveles entre 100 y 125 miligramos de glucosa en sangre en ayuno, superior a los 126 ya es diabetes.
Comentó que la detección de esta situación es fácil, no obstante se debe tener en cuenta que muchas personas pueden disminuir momentáneamente su ingesta calórica o de alimentos ricos en grasas y azúcares, y obtienen resultados normales.
Ante esto, la experta del Seguro Social recomienda tomar la glucosa por lo menos tres veces a la semana, si se tienen los factores de riesgo antes descritos, lo ideal es tomarla en ayuno, antes de la hora de la comida al medio día, y dos horas aproximadamente después de esta última medición.
Comentó que la ventaja de conocerse prediabético es que el paciente puede iniciar un cambio de vida disminuyendo la ingesta de azúcares, grasas y carbohidratos en su alimentación diaria, además de realizar un programa de ejercicios para regular los niveles de azúcar en sangre.
Alertó que la estimación para México en el futuro es que de cada tres personas, dos desarrollarán diabetes, por lo tanto el riesgo es muy alto para la población en general.